Reportaje

La lucha de una mujer contra el sida en Ucrania

13 de marzo de 2007

20070313_policewoman_240.jpg

La historia de Tatiana Semikop comienza en 1994, cuando trabajaba como oficial de policía criminal en Odessa. En ese año, se encontró con un niño de tan solo 11 años que vivía con el VIH y no sabía dónde o a quién acudir para pedir ayuda. Entonces Tatiana no sabía prácticamente nada sobre el sida, pero estaba decidida a ayudar al niño, por lo que se puso a investigar sobre la enfermedad y sobre cómo podría encontrar una forma de cuidar al niño. Sin embargo, cuanto más buscaba, más se daba cuenta de lo poco que había disponible.

“Estaba realmente sorprendida”, dijo Tatiana”. “No podía creer que en la región o en la ciudad nadie pudiera darme la información que buscaba, nadie sabía nada, como si la enfermedad no existiera”.

Investigando

Mientras seguía buscando más información sobre el sida, Tatiana oyó hablar de un taller de trabajo organizado por el ONUSIDA para informar sobre la prevención del VIH a las fuerzas del orden. A través de este taller, Tatiana aprendió mucho sobre los complicados temas relacionados con el sida en Ucrania y los diferentes tipos de intervenciones que se necesitan en el país para ayudar a frenar la propagación de la enfermedad.

Ucrania sufre una de las peores epidemias de sida de Europa. A finales de 2005, unas 400.000 personas vivían con el VIH y se calcula que la prevalencia del VIH entre adultos era de un 1,4%. La epidemia en Ucrania se concentra principalmente entre las poblaciones clave de mayor riesgo, y el 60% de las personas que viven con el VIH consumen drogas inyectables.

“El uso de un equipo de inyección no esterilizados es la principal causa del contagio por el VIH en este país”, afirmó Anna Shakarishvili, Coordinadora del ONUSIDA en el País. “Más del 45% de las nuevas infecciones por el VIH registradas en la primera mitad de 2006 se dieron entre consumidores de drogas inyectables. Sin embargo, la transmisión sexual de la infección por parte de consumidores de drogas está aumentando rápidamente y el número de niños que nacen de madres VIH-positivas sigue creciendo”, añadió.

20070313_street_300.jpg

Un enfoque sin precedentes

Debido a su trabajo como policía, Tatiana se encontraba con consumidores de drogas inyectables a diario, y por ello pensó que tendría sentido empezar centrando aquí los esfuerzos de prevención del VIH. Con su ayuda, comenzaron a asentarse los primeros proyectos para reducir los daños del consumo de drogas inyectables.

Una característica única de estos programas fue la cooperación con las fuerzas del orden y un acuerdo con el alcalde de Odessa que permitió que estas actividades tuvieran lugar, un avance realmente significativo para el país en aquella época.

“No podíamos creer que nos hubiéramos realmente atrevido a dar un paso tan innovador para afrontar la epidemia”, afirmó uno de los siete miembros del pequeño grupo que inició el proyecto piloto. “Esto no se había hecho jamás en Ucrania”.

Desde estos modestos inicios, hoy hay programas que se centran en el consumo de drogas inyectables y el VIH en todo el país, que se han convertido en herramientas de prevención del VIH muy respetadas.

Doce años más tarde

Doce años después de su primer encuentro con el sida, Tatiana Semikop ha ascendido al rango de teniente-coronel, es autora de una disertación científica sobre las características psicológicas del trabajo policial en relación con el sida, y es la presidenta de una de las organizaciones no gubernamentales más importantes de Ucrania, Vera, Nadezhda, Lubov (“Fe, Esperanza y Amor”). En marzo de este año, Tatiana recibió su segundo galardón “Mujer del Año” de las fuerzas del orden de Odessa por su compromiso y dedicación a la respuesta al sida.

Inspirados por el ejemplo de su madre, los hijos de Tatiana han seguido sus pasos. Su hija Nina, de 16 años, da charlas sobre el sida en su instituto, participa en varios proyectos y escribe artículos sobre el sida para un periódico local. Su hijo Evgeny, de 24 años, ya es coordinador de uno de los proyectos de servicios del VIH en Odessa.

Vera, Nadezhda, Lubov

La organización de Tatiana Vera, Nadezhda, Lubov ofrece diferentes servicios en toda Odessa y los distritos vecinos, entre los que se incluye un punto especial móvil de asesoramiento y pruebas, que realiza pruebas del VIH y de otras enfermedades de trasmisión sexual a las profesionales de sexo en su lugar de trabajo y que ayuda a las mujeres que sufren violencia por motivos de sexo.

20070313_office_300.jpg

La organización cuenta con más de 100 miembros y ofrece servicios de información y capacitación sobre el sida y otros temas relacionados en los centros educativos de la ciudad y de las áreas rurales. Vera, Nadezhda, Lubov también publica un periódico dirigido a los usuarios de drogas inyectables, los profesionales del sexo y las personas que viven con el VIH.

Tatiana se siente especialmente orgullosa de la creación de un centro comunitario para personas que viven con el VIH y para las poblaciones clave de mayor riesgo. “Organizamos excursiones al campo, vacaciones y tenemos exposiciones de fotografía especiales, un grupo de autoayuda y un club social”, afirmó.

Trabajar en temas relacionados con el sida se ha convertido en una fuente de inspiración para Tatiana y sus colegas. Muchos empleados de la organización tienen experiencias personales de drogadicción y entraron en contacto con la organización cuando buscaban apoyo. Ahora, tras haber recibido una formación y adquirido experiencia profesional, se han convertido en empleados imprescindibles, comprometidos con la ayuda a otras personas que tienen una situación personal similar.

“La explicación de nuestro éxito es muy simple”, declaró Tatiana. “Creemos en lo que hacemos y recogemos los frutos de nuestro esfuerzo todos los días"




Enlaces:

Leer más acerca de Ucrania
Leer más sobre la Conferencia europea sobre el sida: Responsabilidad y asociación - Unidos contra el sida.