Reportaje

El virus de la gripe A (H1N1) será el tema dominante de la 62ª Asamblea Mundial de la Salud

18 de mayo de 2009

60th WHA
Fotografía (60ª Asamblea Mundial de la Salud)
OMS/Peter Williams

La Asamblea Mundial de la Salud de este año tiene previsto prestar una gran atención al brote generalizado del virus de la gripe A (H1N1). Los ministros y funcionarios de Sanidad de más de 190 países se han reunido en Ginebra del 18 al 22 de mayo para analizar las respuestas más efectivas a la posible pandemia, así como la preparación para el tratamiento y el acceso a las vacunas y las cepas del virus.

 Según las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se ha registrado un total de 8480 casos de gripe A (H1N1) en 39 países. (Datos actualizados el 17 de mayo).El virus representa un riesgo creciente para la salud. Ante lo imprevisible de esta amenaza, la directora general de la OMS, la Dra. Margaret Chan, ha hecho un llamamiento a la "solidaridad mundial". La Asamblea proporcionará una oportunidad para ponerla en práctica.

El evento, convocado por la directora general de la Organización Mundial de la Salud, también seguirá con las amplias competencias que tienen asignadas para supervisar los progresos realizados y establecer nuevas prioridades para la OMS. Entre los otros temas que se examinarán se encuentran el fortalecimiento de los sistemas de atención sanitaria, incluyendo la primaria, la exploración de los factores determinantes de la salud y la monitorización de la consecución de los Objetivos de Desarrollo del Milenio relacionados con esta. También habrá tiempo para debatir sobre los planes presupuestarios para los próximos dos años y para asuntos de índole interna.

Un elemento clave de esta reunión es la toma en consideración de la versión revisada del plan estratégico a medio plazo 2008-2013, que tiene 13 objetivos, entre los que se incluyen: disminuir la carga sanitaria, social y económica de las enfermedades transmisibles; mitigar las consecuencias sanitarias de las emergencias, los desastres, las crisis y los conflictos; asegurar la mejora en el acceso, la calidad y el uso de tecnologías y productos médicos; y evitar la propagación del sida, la tuberculosis y la malaria.

Los delegados esperan obtener el mismo éxito que en las reuniones previas. Por ejemplo, en 2008 la Asamblea respaldó una estrategia de salud pública, innovación y propiedad intelectual que promovía nuevos enfoques en la investigación y el desarrollo de medicamentos, y abogaba por la eliminación de barreras y la mejora en el acceso a los fármacos, en especial en los países menos desarrollados. En la reunión también se adoptó una resolución que instaba a los Estados miembros a actuar de forma decisiva para hacer frente a la incidencia en la salud achacable al cambio climático.

Está previsto que la Asamblea Mundial de la Salud examine un conjunto de temas de gran complejidad que va más allá del ámbito sanitario, y que aborda y conecta con una amplia variedad de sectores, con el propósito de lograr una solución a las amenazas sanitarias mundiales.

A lo largo de esta semana, el director ejecutivo de ONUSIDA, el Sr. Michel Sidibé, participará en una serie de eventos paralelos, entre los que se pueden destacar varias reuniones con ministros de Sanidad de todo el mundo.