Reportaje

Un nuevo estudio indica un descenso en el número de fallecimientos maternos

14 de abril de 2010

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Un nuevo informe publicado en la revista médica The Lancet indica que, por primera vez en las últimas décadas, se ha producido un descenso significativo en el número de mujeres que fallecen al año a causa del embarazo o en el momento del parto. Fotografía: ONUSIDA/P.Virot

Un nuevo informe publicado en la revista médica The Lancet indica que, por primera vez en las últimas décadas, se ha producido un descenso significativo en el número de mujeres que fallecen al año a causa del embarazo o en el momento del parto. Los investigadores especializados en este campo han hecho una estimación aproximada, y calculan que el número de fallecimientos maternos ha descendido desde un total de 526.300 en el año 1980 hasta 343.900 en 2008.

El director ejecutivo de ONUSIDA Michel Sidibé ha recibido de buen grado los datos que arroja dicho informe mientras se encontraba en la presentación de la Reunión sobre el esfuerzo conjunto del Secretario General en materia de salud de la mujer y de los niños. Esta reunión, de dos días de duración, ha congregado a los líderes mundiales del sector sanitario, a fin de tomar decisiones conjuntas y de crear nuevos métodos para alcanzar las metas establecidas por los diferentes países en cuanto a la consecución de los objetivos de desarrollo del milenio números 4 y 5.

Así, el informe, llevado a cabo por la Universidad de Washington y la Universidad de Queensland, y financiado por la Fundación Bill & Melinda Gates, hace hincapié en el hecho de que los avances hasta ahora logrados en lo que se refiere a la reducción de la mortalidad materna se han visto afectados por la actual epidemia del VIH. Aproximadamente, uno de cada cinco casos de fallecimiento materno (que sumaron un total de 61.400 en 2008) puede estar relacionado con el VIH; de ahí que muchos países con una alta densidad de población infectada por el VIH hayan tenido más dificultades a la hora de reducir los índices de mortalidad materna. En Sudáfrica, por ejemplo, más de un 50% de las muertes dentro de este grupo de población se debe al VIH.

Este estudio es un claro ejemplo de que los avances logrados en materia de salud materna dependen casi íntegramente del progreso alcanzado en la respuesta al sida en aquellos países en los que la epidemia del sida es más fuerte.

Michel Sidibé,  director ejecutivo de ONUSIDA

"Este estudio es un claro ejemplo de que los avances logrados en materia de salud materna dependen casi íntegramente del progreso alcanzado en la respuesta al sida en aquellos países en los que la epidemia del sida es más fuerte", afirmó el director ejecutivo de ONUSIDA.

El Sr. Sidibé hizo hincapié en que ONUSIDA sigue solicitando un apoyo constante para la eliminación de la transmisión maternoinfantil del virus, tal y como aparece indicado en su Marco de resultados 2009-2011. Asimismo, quiso poner de manifiesto, una vez más, el compromiso del Programa de garantizar que las mujeres que viven con el VIH tengan acceso al tratamiento antes y después del parto, a fin de asegurarse de que los bebés no contraigan la infección, y de que sus madres continúen gozando de un buen estado de salud.

Existen pruebas que demuestran que la administración oportuna de medicamentos antirretrovíricos a mujeres embarazadas VIH-positivas reduce considerablemente el riesgo de transmisión maternoinfantil del virus: se trata de una práctica que ha sido demostrada, que no es costosa y que, además, es efectiva. Con todo, a finales de 2008, en los países de ingresos bajos y medianos, solo un 45% de las embarazadas que vivían con el VIH recibieron el tratamiento que necesitaban. Conseguir avances en este aspecto únicamente es posible a través del logro de una mejora en la calidad de los datos registrados, así como por medio de la inclusión de programas de prevención de la transmisión maternoinfantil del VIH en los planes de salud reproductiva generales.