Reportaje

Resolución histórica sobre las violaciones de los derechos humanos basadas en la orientación sexual y la identidad de género adoptada en el Consejo de Derechos Humanos

27 de junio de 2011

Fotografía: UN Photo/Jean-Marc Ferré

Durante su 17ª sesión, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas aprobó el 14 de junio una resolución histórica sobre las violaciones de los derechos humanos basadas en la orientación sexual y la identidad de género. Presentado al Consejo de Derechos Humanos por Sudáfrica y Brasil, el proyecto de resolución fue copatrocinado por 39 países de todas las regiones del mundo. Esta es la primera resolución de las Naciones Unidas sobre este tema y se aprobó con 23 votos a favor, 19 votos en contra y 3 abstenciones.  

La homofobia y la transfobia, que bloquean las respuestas eficaces al VIH, están institucionalizadas en muchas partes del mundo. En 2010, más de 75 países criminalizaban las conductas homosexuales y en algunos países están penadas con la muerte. Las personas transgénero con frecuencia se enfrentan a la discriminación y la violencia y recientemente se ha informado de asesinatos en Guatemala y Honduras entre otros países.

Titulada Derechos humanos, orientación sexual e identidad de género (L.9/Rev.1), la resolución hace un llamamiento para realizar cuatro acciones clave, incluida una solicitud para que el Alto Comisionado para los Derechos Humanos realice un estudio mundial que documente leyes y prácticas discriminatorias y actos de violencia contra las personas basados en su orientación sexual e identidad de género. Este estudio también delineará el modo en que se pueden usar las leyes internacionales sobre derechos humanos para acabar con la violencia y las violaciones de los derechos humanos  basadas en la orientación sexual y la identidad de género.

El consejo decidió además realizar una mesa redonda durante la 19ª sesión del Consejo de Derechos Humanos, que contará con la información de los hallazgos del estudio realizado por el Alto Comisionado. La mesa redonda tendrá como objetivo mantener un diálogo transparente, informado y constructivo sobre el tema de las leyes y prácticas discriminatorias, así como los actos de violencia contra las personas basados en su orientación sexual y su identidad de género.

Esta resolución es un paso importante para la comunidad internacional. Debemos eliminar todas las barreras que impiden que las personas accedan a los servicios relacionados con el VIH debido al estigma y la discriminación basados en la orientación sexual y la identidad de género.

Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA

"Esta resolución es un paso importante para la comunidad internacional. Debemos eliminar todas las barreras que impiden que las personas accedan a los servicios relacionados con el VIH debido al estigma y la discriminación basados en la orientación sexual y la identidad de género", enfatizó el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé.

La Declaración política sobre el VIH/SIDA: Intensificación de nuestro esfuerzo para eliminar el VIH/SIDA, recientemente adoptada por la Asamblea General, menciona por primera vez a los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres como un grupo específico en mayor riesgo de contraer el VIH y afirma que "muchas estrategias nacionales de prevención del VIH se centran inapropiadamente en las poblaciones que tienen un mayor riesgo según los datos epidemiológicos”.

En 2009, 63 de 67 países notificaron una mayor prevalencia del VIH entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres en comparación con la población general. La homofobia y la transfobia bloquean las respuestas eficaces al VIH, llevando a las poblaciones ya vulnerables a la clandestinidad y colocándolas fuera del alcance de los servicios de tratamiento y prevención del VIH. 

La estrategia ONUSIDA 2011-2015: Llegar a cero hace un llamamiento a una revolución en la prevención del VIH a fin de reducir a la mitad las nuevas infecciones por el VIH transmitidas por vía sexual para 2015, incluidas las producidas entre los jóvenes, los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y la transmisión en el ámbito de los profesionales del sexo; un objetivo global puesto de relieve por la declaración política de 2011 sobre el VIH/Sida anteriormente mencionada.