Reportaje

Restricciones para viajar relacionadas con el VIH: últimos progresos

22 de julio de 2012

De izquierda a derecha: Comoderadores de la reunión satélite sobre las restricciones de viaje relacionadas con el sida, el Dr. Paul De Lay, director ejecutivo adjunto de programa y el profesor Myongsei Sohn, decano de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Yonsei.

Al inaugurar la reunión satélite sobre Restricciones para viajar relacionadas con el VIH: últimos progresos, el director ejecutivo de programa de ONUSIDA y comoderador del grupo, el Dr. Paul De Lay dijo "Resulta adecuado que una de las primeras reuniones satélites de AIDS2012 trate las restricciones para viajar. No estaríamos aquí hoy si el gobierno de los EE. UU. no hubiera levantado las restricciones de entrada, estancia y residencia relacionadas con el VIH en enero de 2010".

Copatrocinada por ONUSIDA y el Gobierno de la República de Corea, la reunión satélite estuvo dirigida a conocer los recientes progresos realizados en Corea respecto de sus propias restricciones, así como a evaluar en qué punto se encuentra la situación mundial en lo referente a las restricciones de viaje tras 30 años de epidemia.

"Es muy elocuente y significativo que todavía haya muchas personas inocentes a las que se les han negado derechos humanos básicos solo porque viven con el VIH", dijo Kim Bong-hyun, viceministro de Asuntos Multilaterales y Mundiales y ministro de Asuntos Exteriores y Comercio de la República de Corea en su discurso de apertura. "Me complace afirmar, en nombre de mi gobierno, que la República de Corea no tiene restricciones para viajar específicas para el VIH bajo la Ley de Control de la Inmigración y que está poniendo en práctica sus regulaciones. Levantar las restricciones de viaje es un pequeño paso en nuestro largo camino por conseguir una sociedad en la que no haya discriminaciones contra las personas que viven con el VIH", añadió.

Con el anuncio de la República de Corea y Ucrania, ocho países han levantado sus restricciones desde 2010. Sin embargo, unos 45 países, territorios y áreas siguen empleando alguna forma de restricción a la entrada, estancia y residencia de las personas que viven con el VIH ("restricciones para viajar relacionadas con el VIH).

El impulso para eliminar las restricciones restantes está creciendo. Helga Ying, directora general del Asuntos Gubernamentales y Política Pública Globales de Levi Strauss & Co., describió una iniciativa de ONUSIDA, en colaboración con el Consejo Empresarial Mundial sobre Salud, en la que 24 directores generales han firmado un compromiso contra las restricciones de entrada, estancia y residencia relacionadas con el VIH.  "Los viajes globalizados y los traslados se han convertido en habituales; las empresas deben trasladar a sus mejores talentos allí donde los necesitan. Estas restricciones no solo hacen daño a las personas, sino también a los negocios", dijo la Sra. Ying. El objetivo de la iniciativa es conseguir que 100 directores generales firmen el compromiso para el Día Mundial del Sida de 2012. "Todo el mundo puede marcar la diferencia y las empresas también", añadió la Sra. Ying.

Levantar las restricciones de viaje es un pequeño paso en nuestro largo camino por conseguir una sociedad en la que no haya discriminaciones contra las personas que viven con el VIH

Kim Bong-hyun, viceministro para Asuntos Multilaterales y Mundiales, ministro de Asuntos Exteriores y Comercio de la República de Corea

Los participantes en la reunión satélite también conocieron la experiencia de Ucrania en la eliminación de sus restricciones. La Dra. Marina Zelenska, directora del departamento de VIH/Sida del servicio estatal para las enfermedades sociales de Ucrania describió cómo en 2010 el país decidió modificar la ley para garantizar que ofrezca protección social y jurídica a las personas que viven con el VIH y prevenir la discriminación. Parte de dicha reforma de la ley consistió en eliminar la disposición que prohibía la entrada de las personas seropositivas.

George Bartolome, de United Western Visayas, un grupo de apoyo a las personas que viven con el VIH de las islas centrales de Filipinas, presentó una impactante historia personal sobre cómo se habían aplicado las restricciones para viajar contra él cuando era trabajador emigrante en Arabia Saudí. Cuando le dijeron que era seropositivo estaba tan estupefacto que, al salir a la calle, le atropelló un coche. Después, lo trasladaron al hospital y lo encerraron en una habitación durante diez días antes de deportarlo. "Fue una experiencia horrible; no se la deseo a nadie.  Fue traumático". Recomendó que todos los gobiernos eliminaran dichas restricciones. "El VIH no es un motivo para la deportación".

Otro asunto clave comentado en la reunión fue el gran número de emigrantes que están sujetos a la realización de pruebas para la detección del VIH obligatorias antes de su salida y después de su llegada o que son deportados sumariamente cuando el país de destino descubre que están infectados, sin consentimiento informado, asesoramiento ni confidencialidad. Malu Marin, de Action for Health Initiatives (ACHIEVE), Inc./CARAM Asia, destacó que dichas restricciones tienen todavía menos sentido con los significativos avances realizados en el tratamiento del VIH, que hacen que las personas que viven con el VIH vivan mucho tiempo, sean ciudadanos productivos y no supongan ningún riesgo de contagio.

En este momento histórico del regreso de la Conferencia internacional sobre el sida a los Estados Unidos, la reunión satélite contribuyó a impulsar acciones adicionales y a llamar la atención sobre las restricciones para viajar relacionadas con el VIH, con el reconocimiento de que todavía quedan 45 países que las utilizan. ONUSIDA se comprometió a apoyar a dichos gobiernos para que eliminen dichas restricciones y a garantizar que todas las naciones adopten enfoques hacia el VIH eficaces y basadas en los derechos.