Reportaje

Los países asiáticos empiezan a introducir la PrEP

02 de noviembre de 2016

La Clínica Anónima de la Cruz Roja Tailandesa (TRCAC) se encuentra a espaldas de una bulliciosa calle de Bangkok (Tailandia). Es un lugar familiar para Jonas Bagas, que visita el frondoso recinto porque toma la profilaxis previa a la exposición (PrEP) como parte de un proyecto dirigido por la clínica.

La PrEP es el uso del antirretrovírico en forma de una pastilla diaria para evitar que la gente contraiga el VIH. Se ha demostrado que es muy eficaz en la prevención de la transmisión del VIH entre las personas con un alto riesgo de infección.

"Una razón por la que empecé es porque tenía una pareja sexual seropositiva", explica el Sr. Bagas, que es de Filipinas, pero vive en Bangkok por su trabajo con el Consejo de Organizaciones de Servicio sobre el Sida de Asia y el Pacífico.

La TRCAC comenzó su proyecto de PrEP a finales de 2014. A los usuarios se les cobra 1 dólar al día por el suministro de pastillas, junto con el asesoramiento y las evaluaciones de salud recomendadas. La PrEP es solo para las personas seronegativas, por lo que los usuarios se someten a una prueba inicial del VIH y un chequeo de otras infecciones de transmisión sexual, así como a pruebas adicionales para medir cómo funcionan el hígado y los riñones. Después del primer mes, los usuarios repiten la evaluación y después vuelven a realizarse las pruebas cada tres meses.

Los efectos secundarios más habituales de la PrEP son náuseas, dolor de cabeza y pérdida de peso el primer mes, pero durante los ensayos no se ha observado ninguna toxicidad grave. "A mí me entran unas enormes ganas de dormir después de tomar la PrEP, pero puesto que me la tomo por la noche, no supone una gran desventaja.

Aunque el cumplimiento terapéutico y la realización regular de las pruebas del VIH suponen problemas para aumentar el uso de la PrEP, los investigadores la describen como un avance en la prevención del VIH. El uso habitual del preservativo sigue siendo escaso en Asia. En la mayoría de las grandes ciudades menos de la mitad de los hombres homosexuales y otros hombres que tienen relaciones con hombres utiliza los preservativos habitualmente, lo que es una cifra demasiado baja como para que repercuta en la detención de la epidemia de sida. ONUSIDA y la Organización Mundial de la Salud recomiendan la PrEP como una opción de prevención adicional para las personas con un riesgo importante de exposición al VIH y que están dispuestas a realizarse las pruebas del VIH con regularidad.

"Hemos esperado bastante tiempo para tener un método de prevención del VIH que se pueda usar en la intimidad y sin ansiedad. La PrEP es la respuesta", dijo Nittaya Phanuphak, directora del departamento de Prevención del Centro de Investigación del Sida de la Cruz Roja Tailandesa.

La PrEP no evita otras infecciones de transmisión sexual y no es un método anticonceptivo, por lo que los expertos sanitarios afirman que es mejor integrarla con otros servicios de salud sexual y reproductiva, incluido el suministro de preservativos.

Las encuestas hechas a posible usuarios de Asia revelan que aun existe una escasa concienciación de la PrEP como método de prevención. "Espero que pronto se pueda acceder a la PrEP en Filipinas", dijo el Sr. Bagas.

De hecho, la organización no gubernamental, LoveYourself, arranca en noviembre un proyecto piloto sobre la PrEP, que incluye chequeos regulares, la reducción de riesgos y el asesoramiento para el cumplimiento, en sus dos clínicas de Manila (Filipinas). "Integraremos la educación sobre la PrEP en el proceso de detección del VIH. Así, todos aquellos que se realicen las pruebas del VIH en nuestras clínicas, entre 60 y 100 personas al día, recibirán información sobre la PrEP", declaró Chris Lagman, director de Aprendizaje y Desarrollo de LoveYourself.