Reportaje

La ruta juvenil por la concienciación sobre el VIH viaja 1000 kilómetros hasta ICASA

07 de diciembre de 2017

Los jóvenes bajaron atropelladamente del autobús, felices de haber llegado a Costa de Marfil. Por fin podían estirar las piernas después de la última etapa de su viaje, pero es que además habían llegado a su destino final, la Conferencia Internacional sobre el Sida y las Infecciones de Transmisión Sexual en África (ICASA). La caravana juvenil inició su andadura en Nigeria, con 10 jóvenes, prosiguió por Benín, donde se le unieron 10 más, e hizo otras dos paradas más en Togo y en Ghana.

Durante un viaje de tres días y 1000 kilómetros, más de 40 jóvenes compartieron sus historias y experiencias y hablaron sobre el VIH, el estigma y el empoderamiento de los jóvenes en diversas ciudades a lo largo de su ruta.

Jefferson Kudolo, uno de los participantes procedente de Ghana, no podía creerse lo divertido que estaba siendo el viaje, pese a la larga distancia a recorrer, “El viaje nos acerco más, y nos olvidamos de los kilómetros”, afirmaba. Dayo Sunday, otro participante de Nigeria, coincidía. Le encantó conectar con personas de otros países con historias similares.

Cada día la caravana juvenil organizó o asistió a algún evento, entre los que se incluyeron proyecciones de películas relacionadas con el VIH, un encuentro con la primera dama de Benín, debates y una competición internacional de baile.

El Sr. Sunday mencionaba que la música y el baile no solo hacían que el grupo se relajara, sino que también les permitieron interactuar con otros jóvenes a lo largo del camino. El joven, que trabaja como educador inter pares en la organización no gubernamental Nigerian Teens and Kids, afirmaba “El baile es una de las mejores herramientas para atraer a las personas que quizá sean demasiado tímidas como para acudir a eventos relacionados con el VIH”.

“Sé lo que funciona, y no cabe duda de que la música lo hace”, decía el Sr. Kudolo mientras explicaba cómo él mismo y los otros participantes de la caravana juvenil distribuirían preservativos y cantidad de consejos prácticos en los lugares que visitaran. ONUSIDA y sus colaboradores comenzaron a reunir a los participantes de la caravana juvenil hace cerca de un año.

Kodo Ngabane, director de Juventud y Organización Social de ONUSIDA para la región de África occidental y central, sonrió con orgullo cuando el autobús se detuvo en Abiyán. “No paramos de decir que hay que implicar a los jóvenes, y aquí tenemos un claro ejemplo de implicación”, comentaba. “Hemos escuchado a los jóvenes y ellos han sido quienes llevaban las riendas”. Acto seguido, añadía “En sentido figurado, no conduciendo el autobús de verdad”.

Eric Gunn, que acompañaba a las jóvenes participantes de la asociación de muchachas de Togo Action de Soutien au Developpement et l’Education de la Jeune Fille, confesó que se sintió emocionado al ver semejante entusiasmo. “Se produjo una verdadera conciencia de grupo, sin importar el país, idioma, género u orientación sexual”, contaba. “Incluso los más mayores participamos de la diversión, y nos bombardearon con preguntas”.

La caravana juvenil fue recibida en la aldea comunitaria de ICASA por Raymonde Goudou-Coffie, ministra de Salud de Costa de Marfil, el Rey Oyo de Uganda y Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA, entre otros.

Después de que los asistentes ovacionaran en pie y aplaudieran prolongadamente a los participantes, el Sr. Sidibé se dirigió al público. “¡Contamos con vosotros! Vosotros no sois los líderes del futuro, sois los líderes del presente”, dijo. “Sin los jóvenes, no pondremos fin al sida”.