Reportaje

Un grito de alianza y unión: Es el momento de conseguir que el sistema de atención sanitaria sea más flexible e innovador

16 de abril de 2018

Siete meses después de lanzar el plan de emergencia en África central y occidental, el avance en lo que respecta al número de personas que siguen un tratamiento antirretrovírico continua siendo lento en la región. Muchos países no alcanzarán los principales objetivos para el 2010 si los sistemas actuales no cambian.

Michel Sidibé, Director Ejecutivo de ONUSIDA, comentó lo siguiente: "En general, ha habido un aumento del 10 % en el número de personas que están en tratamiento, pero esta cifra no es suficiente". También añadió que "ahora una sensación de urgencia aun mayor".

De todos modos, Sidibé subrayó el éxito en la República Democrática del Congo, donde hubo un claro aumento del número de personas que viven con el VIH que pudo acceder a tratamientos antirretrovíricos. Entre las razones de esta evolución positiva, se encuentranla sociedad civil y los líderes políticos, que trabajan en estrecha colaboración, y las pruebas del VIH en las comunidades y la formación de 11.000 trabajadores del sistema sanitario, herramientas que también desempeñan un papel importante.

Sidibé afirmó que "ahora más que nunca debemos poner en tela de juicio los sistemas sanitarios y buscar alternativas para que las personas puedan acceder a la atención sanitaria". 

La petición para delegar en las comunidades la atención al paciente fue una importante solicitud de movilización durante la AFRAVIH, la conferencia internacional francófona sobre el VIH y la hepatitis que tuvo lugar en Burdeos (Francia) a principios de abril. En la ceremonia de apertura, Sidibé compartió brevemente el escenario con la organización de la sociedad civil Coalition PLUS. Dijeron que la clave del éxito para poner fin al sida era unir fuerzas entre médicos y trabajadores comunitarios de la salud, así como dar un margen mayor a las comunidades para responder a las necesidades locales de su población.

Bajo el lema "Desmedicalizar", la organización explicó que los médicos nunca iban a reemplazarse, pero que había pocos y que las personas que vivían con el VIH no necesitaban cuidados intensivos.

El último informe de Coalition Plus estableció que los gobiernos y los profesionales de la salud deberían encomendar más tareas a las enfermeras y los trabajadores comunitarios de la salud. Además de posibilitar una prevención más precisa y un acceso más rápido al tratamiento, esta delegación de tareas no médicas podría aligerar la sobrecarga que sufren los sistemas sanitarios. Tanto África central como África occidental representan el 17 % del total de la población que vive con el VIH, pero el 30 % de las muertes en esta zona se debe a enfermedades relacionadas con el VIH. Según ONUSIDA y sus colaboradores, se trata de una región que puede beneficiarse enormemente de los modelos de atención de la comunidad.

Lo que preocupa a Médicos Sin Fronteras (MSF) es el riesgo de un descenso significativo de los recursos destinados a los tratamientos, ya que afectará negativamente a las recientes mejoras en África central y occidental. Esta preocupación tiene que ver con que el Fondo Mundial estima una caída del 30 % en la asignación de fondos para la región para el período 2018–2020 en comparación con las subvenciones para el VIH que se firmaron en el último período de asignación. En 2016, MSF estuvo entre los primeros que dieron la voz de alarma por el elevado número de víctimas del VIH y por un porcentaje de hasta un 80 % de niños que no tienen acceso a terapia antirretrovírica. Nathalie Cartier, Asesora Política y Responsable de la Acción sobre el sida para MSF, dijo que ellos apoyaban el plan de emergencia de África central y occidental, pero que necesitaba aplicarse de forma completa. Declaraba lo siguiente: "La voluntad política ha sido prometedora, pero ahora es momento de hacer que sea una realidad sobre el terreno para que las personas que viven con el VIH puedan beneficiarse".

El Fondo Mundial apoyó el punto de vista de MSF y declaró claramente que el número de desafíos y la escasez de tratamientos antirretrovíricos ha disminuido gracias al lanzamiento del plan de emergencia en numerosos países. Desde su punto de vista, la movilización de una financiación nacional suplementaria en materia sanitaria es vital para la titularidad nacional, así como para la construcción de programas sostenibles. Esta no es más que una razón más para descentralizar los sistemas sanitarios e invertir capital en innovación para mantener bajos los costes sanitarios.  La prueba de autodiagnóstico del VIH, las nuevas medicinas y las estrategias de alto impacto en las que participen las comunidades son vitales para aumentar la eficiencia.  

Cheick Tidiane Tall, Director de Réseau EVA, una red de pediatras especializados en atención del VIH, dijo lo siguiente: "Con los análisis mediante los puntos de atención (POC, por sus siglas en inglés) en comunidades y hogares, los retrasos entre el diagnóstico y el inicio del tratamiento son mínimos". A lo que añadió: “A largo plazo, se salvan un gran número de personas y de recursos”.

El profesor de Enfermedades Infecciosas y Tropicales de Côte d'Ivoire , Serge Eholié, no podría estar más de acuerdo.  Comentaba que "los sistemas de atención sanitaria flexibles y que invierten en innovación son muy útiles". Girándose hacia el Ministro de Salud de la República Centroafricana, Pierre Somse, le preguntaba: "¿Qué dice usted al respecto?"

Somse, que también es un médico curtido, le respondía: "Nosotros, los médicos, seguiremos siendo médicos. Sin embargo, necesitamos apoyarnos en las comunidades y viceversa".  Añadió que "el quid de la cuestión son los pacientes, que son y siempre deben ser la prioridad".