Comunicado de prensa

Líderes mundiales solicitan acciones rápidas e inversiones más inteligentes para acelerar el final de la epidemia de sida

La innovación y los nuevos modelos de aplicación permitirán a los países cumplir las promesas en materia de sida para 2030

NUEVA YORK/GINEBRA, 27 de septiembre de 2015—Los Gobiernos de Kenya y Malawi, en colaboración con ONUSIDA, han realizado un llamamiento urgente en pro de nuevas inversiones y mejoras en la prestación de servicios sanitarios, a fin de encaminar al mundo hacia el final de la epidemia de sida para 2030.

Dicho llamamiento se llevó a cabo durante un evento de alto nivel en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, en vísperas de la histórica 70ª Asamblea General de las Naciones Unidas. Líderes de todo el mundo se han reunido con esta ocasión, con el objetivo de expresar su apoyo y compromiso para con el enfoque de Acción acelerada de ONUSIDA, así como para buscar nuevos modelos innovadores que permitan ofrecer servicios de atención sanitaria básica a las personas que más lo necesitan.

“Creemos que estamos en el buen camino, pero alcanzar los objetivos de Acción acelerada no será fácil”, declaró el Presidente de Malawi Peter Mutharika. “Debemos ampliar y mejorar los servicios relacionados con el VIH. Malawi está preparado para ser testigo de este viaje hacia el final de la epidemia de sida para 2030”. El país ya ha tomado medidas audaces para lograr la consecución de sus objetivos, pues ha anunciado recientemente que ofrecerá terapia antirretrovírica a todas las personas que viven con el VIH de aquí a abril 2016.

La respuesta al sida está considerada como la respuesta a una epidemia moderna que ha logrado los mejores resultados hasta la fecha. A lo largo de los últimos 15 años, se ha registrado una reducción masiva en el número de nuevas infecciones por el VIH, así como en la cifra de muertes relacionadas con el sida. Además, más de 15 millones de personas tienen ya acceso al tratamiento antirretrovírico.

A fin de seguir avanzando en la respuesta al sida, ONUSIDA ha desarrollado un enfoque de Acción acelerada para alcanzar un conjunto de objetivos con plazos definidos de aquí a 2020. Entre ellos, se incluyen los siguientes: reducir la cifra de nuevas infecciones por el VIH en un 75%, y garantizar que el 90% de las personas que viven con el VIH conozcan su estado serológico, que el 90% que lo conocen tengan acceso al tratamiento, y que el 90% de las personas que lo tengan logren reducir la carga viral. Ello contribuirá a mejorar su estado de salud y disminuir el riesgo de transmisión del virus.

“A lo largo de las últimas décadas, hemos logrado grandes avances en la lucha contra el sida, pero todavía queda por hacer”, constató el Presidente de Kenya Uhuru Kenyatta. “Debemos dedicar más recursos a la respuesta al sida, tanto a nivel nacional como internacional. Tenemos que invertir en los servicios de tratamiento, atención y prevención del VIH, simplemente porque no nos queda otra opción”.

La gran mejora conseguida en materia de servicios a lo largo de los últimos 15 años ha permitido evitar 30 millones de nuevas infecciones y 8 millones de muertes durante ese mismo periodo de tiempo.

“Ya no se trata de un sueño. Tenemos que creer en que podemos acabar con el sida. Desgraciadamente, todavía muchas personas siguen estando estigmatizadas. Debemos realizar esfuerzos en todos los frentes para garantizar que no dejamos a nadie de lado”, apuntó el Presidente de Malí Ibrahim Boubacar Keïta.

Dar mayor prioridad a las personas fue una de las medidas identificadas como esenciales para acabar con la epidemia de sida. En los lugares donde se capacita a las personas expuestas a un mayor riesgo de infección por el VIH y aquellas que viven con el VIH, existe una mayor aceptación de los servicios relacionados con el virus.

"Creo que podemos acabar con la epidemia de sida en los próximos 15 años”, afirmó Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA. “Ahora, más que nunca, necesitamos modalidades de aplicación diseñadas de manera inteligente, eficiente, sostenible y, sobre todo, centradas en las personas".

Sin inclusión e igualdad, los grupos de poblaciones clave y los jóvenes seguirán quedándose rezagados. Durante la reunión, intervino Elijah Zacchary, un niño de 12 años procedente de Kenya que vive con el VIH, para hablar de sus esperanzas para el futuro. “Presidentes, gracias por forjar su promesa de acabar con el sida para 2030. Debemos garantizar que todos los niños tengan acceso al tratamiento”, dijo Elijah. “Mi sueño es que, cuando tenga 27 años, ya no habrá estigma. Para entonces, también sueño con poder seguir tomando mi medicación cada día”.

Asimismo, los líderes hicieron un llamamiento en pro de un mayor compromiso por parte de las comunidades, así como de la aplicación de enfoques innovadores liderados por las comunidades para la prestación de servicios de salud. La innovación en programas comunitarios está contribuyendo a mejorar la capacidad que tienen los servicios sanitarios para ofrecer servicios de prevención y tratamiento vitales; de ahí que deba recibir el apoyo y la financiación adecuados.

“Para acabar con el sida en Lesotho, necesitamos integrar el VIH en los servicios de atención sanitaria básica, así como ofrecer los recursos adecuados a nuestros mejores soldados de a pie: los trabajadores sanitarios de las aldeas. De la misma manera, debemos movilizar a las comunidades a través de enfoques innovadores, apoyados por nuestra Majestad el Rey, y coordinar de forma más eficaz el apoyo recibido por parte de nuestros asociados”, declaró Pakalitha Mosisili, Primer Ministro de Lesotho.

Todavía quedan grandes desafíos por afrontar para acabar con la epidemia. De los 36,9 millones de personas que viven con el VIH a nivel mundial, 17,1 millones no saben que han contraído la infección por el VIH. Por ello, es crucial ofrecerles acceso a las pruebas del VIH. Por otro lado, 22 millones de personas siguen sin tener acceso al tratamiento del VIH, de las cuales 1,8 millones son niños.

“En el Caribe, creemos que podemos ser la primera región de todo el mundo en acabar con el sida. Para mantener este objetivo tan ambicioso, debemos realizar una mayor inversión, y esto forma parte de la solidaridad mundial que nos ha llevado a reunirnos hoy aquí”, dijo Timothy Harris, Primer Ministro de Saint Kitts y Nevis.

En la actualidad, hay una diferencia de 12.000 millones de dólares estadounidenses entre los recursos disponibles y los recursos que se necesitan para alcanzar los objetivos de Acción acelerada de ONUSIDA y acabar con la epidemia de sida para 2030.

Durante la jornada, el Presidente Barack Obama intervino en la Cumbre sobre Desarrollo Sostenible y anunció que los Estados Unidos han definido nuevos objetivos para lograr que más personas tienen acceso a servicios vitales de prevención y tratamiento del VIH, haciendo especial hincapié en las adolescentes y las jóvenes.

La Sra. Heather Higginbottom, Vicesecretaria de Estado de los EE.UU. para la Gestión y los Recursos, declaró: “Estamos unidos para celebrar los avances logrados, para expresar nuestra determinación colectiva, y para afrontarnos al desafío que tenemos ante nosotros en el marco de estos nuevos objetivos mundiales: acabar con la epidemia de sida para 2030”.

En los próximos cinco años, la respuesta al sida necesitará adelantar las inversiones y aumentar su diversidad, así como definir mecanismos de aplicación innovadores y asociaciones que garanticen que no se deja a nadie de lado; en particular, a adolescentes, jóvenes y poblaciones clave. Garantizar la seguridad en el suministro de recursos para apoyar la respuesta al sida; centrarse en lugares, poblaciones y programas de mayor impacto, y hacer frente a la discriminación y a la desigualdad de género; y forjar un compromiso en pro de enfoques centrados en las personas y fundamentados en los derechos humanos proporcionará importantes beneficios hasta 2030: evitará 21 millones de muertes relacionadas con el sida, 28 millones de nuevas infecciones por el VIH, y 5,9 millones de nuevas infecciones en niños.

“Hay una generación en peligro. Los jóvenes se están quedando rezagados en la respuesta al sida”, afirmó Charlize Theron, Mensajera de la Paz de las Naciones Unidas y fundadora del proyecto de CTAOP. “Pero todavía existen razones para la esperanza. Sabemos lo que funciona: capacitar a los jóvenes para que cuiden su salud”.

Karen Dunaway, una joven de Honduras que vive con el VIH dijo: “Nosotros, los adolescentes y los jóvenes, deberíamos contar con el apoyo adecuado para participar de manera significativa en la toma de decisiones a todos los niveles, incluidas la formulación de políticas y su aplicación. Los gobiernos deben trabajar en colaboración con la sociedad civil y los jóvenes tienen que asumir la responsabilidad. Juntos, debemos acabar con los prejuicios y el estigma, a fin de que todos los jóvenes tengan acceso a los servicios que necesitan”.

Lograr mejores resultados en materia de salud se enmarca perfectamente en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Además, no solo dará lugar a vidas más saludables, sino que contribuirá a la reducción de la pobreza y la discriminación, así como a la mejora de la seguridad económica.

ONUSIDA

El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) lidera e inspira al mundo para hacer realidad su meta global de cero nuevas infecciones por el VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el sida. ONUSIDA aúna los esfuerzos de 11 organizaciones de las Naciones Unidas (ACNUR, UNICEF, PMA, PNUD, UNFPA, UNODC, ONU Mujeres, OIT, UNESCO, OMS y Banco Mundial) y trabaja en estrecha colaboración con asociados mundiales y nacionales para poner fin a la epidemia de sida para el 2030 como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Obtenga más información en unaids.org y conecte con nosotros a través de Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.