Reportaje

La propiedad nacional es central para desarrollar respuestas al VIH sostenibles

02 de julio de 2010

FamilyFamily in Djibouti. Credit: UNAIDS/P. Virot

La propiedad nacional es central para desarrollar respuestas al sida sostenibles y, sin duda, representa un camino para mejorar la eficacia de la ayuda. ONUSIDA organizó una consulta el 21 de junio de 2010 en Ginebra, con el objetivo de crear un marco idóneo que permita mantener debates sobre propiedad nacional de la respuesta y emprender acciones para ponerla en práctica. La consulta reunió a representantes de gobiernos, la sociedad civil, y órganos regionales y políticos, además de asociados para el desarrollo.

El diálogo dio como resultado una definición clara de la propiedad nacional:

“Un liderazgo nacional que incluye a todos los niveles de diferentes sectores a la hora de gestionar el diseño de políticas y estrategias eficaces relacionadas con el sida, ponerlas en práctica, monitorizarlas, estudiarlas y suministrarles fondos sostenibles, todo ello dentro de la programación nacional para el desarrollo, con el objetivo de garantizar la aplicación de mecanismos amplios de responsabilidad mutua fundamentados en resultados, así como el desarrollo de capacidades nacionales que refuercen la respuesta al sida”.

Los participantes también establecieron indicadores para medir los progresos realizados, que se aplicarán para evaluar la coordinación multisectorial con respecto al sida; leyes y normas no discriminatorias; procesos inclusivos en el desarrollo de estrategias, programaciones, planes operativos y revisiones; el sistema de monitorización, evaluación y corresponsabilidad; la integración del VIH en los planes nacionales de desarrollo y de capacidad para el desarrollo; la financiación sostenible para el VIH; los mecanismos de corresponsabilidad financiera; la armonización y la concordancia; y el desarrollo de capacidades.

Durante su intervención en el foro, Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA, hizo hincapié en la necesidad de que países y donantes pasen de los compromisos de ayuda a corto plazo, a la financiación a largo plazo previsional y sostenible. De acuerdo con Sidibé, “entender la interacción entre la propiedad y la financiación externa” es fundamental para dar respuesta a esa necesidad. Para conseguirlo, hay que prestar atención a las formas en que los donantes más importantes hacen posible la propiedad nacional y capacitan a los asociados de los países.

El embajador Eric Goosby, coordinador mundial de los Estados Unidos para el sida, destacó la importancia de la “corresponsabilidad”. Señaló que es imperativo que los donantes “lleven a cabo sus prácticas de desarrollo de manera que los compromisos con los asociados nacionales y las prioridades sean beneficiosos para todas las partes”.

Los participantes hablaron sobre iniciativas estratégicas para impulsar que los asociados de los países cuenten con más programas y políticas nacionales sobre el sida, y fomentar el uso y la producción de datos probados. Además, analizaron cómo se puede mejorar la propiedad nacional a través de la movilización de más recursos e inversiones internas, así como las funciones y tareas que pueden desarrollar de forma conjunta los asociados nacionales y los que trabajan para el desarrollo, con el fin de reforzar la propiedad de la respuesta.

Un enfoque renovado para la asistencia técnica y el desarrollo de capacidades

Articular mejor y de forma más sostenible las necesidades de los países, formarlos con asociados del norte, y desarrollar la asistencia técnica de forma más agresiva en el sur, así como la cooperación sur-sur, podrían desembocar en un enfoque renovado en cuanto a asistencia técnica. Esto podría garantizar que se rigiese por la demanda en lugar de por el suministro. Por otra parte, incluir el apoyo al desarrollo de las capacidades como una parte integral de la planificación operativa conjunta podría reforzar las respuestas de los países. El ministro de Sanidad de Zambia, Kapembwa Simbao, señaló que “la propiedad nacional se refiere a que un país disponga de la capacidad interna necesaria para monitorizar sus programas”.

La Secretaría de ONUSIDA, en colaboración con todas las partes interesadas, seguirá fomentando la propiedad nacional de la respuesta para que los países puedan tomar decisiones fundamentadas en pruebas e invertir fondos donde son más necesarios, con el fin de conseguir mejores resultados en la respuesta al sida, así como en los objetivos más amplios sobre sanidad y desarrollo que se han marcado los países. ONUSIDA también seguirá apoyando las consultas nacionales y regionales que incluyan a todas las partes implicadas.