Reportaje

Los representantes de las comunidades manifiestan las preocupaciones regionales en la respuesta al sida

27 de agosto de 2011

Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA y Vince Crisostomo, director ejecutivo de la Coalición de Redes sobre el VIH y el Sida en Asia y el Pacífico.
Fotografía: UNAIDS/Kim

Un amplio abanico de representantes de las comunidades afectadas en la respuesta al sida se unió al director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, el 27 de agosto, para mantener un diálogo interactivo en el que compartir sus preocupaciones y reflexiones. La sesión "Common Ground", de una hora de duración y organizada el segundo día del 10º Congreso Internacional sobre el Sida en Asia y el Pacífico (ICAAP 10) se celebró en memoria del Dr. Robert Carr, un conocido activista de la respuesta al sida y defensor de los derechos humanos que falleció en mayo de 2011.

"Mi esperanza es que este espacio cumpla la visión de Robert Carr de la unión de todas las personas, independientemente de quiénes sean, qué sean y dónde estén; que seamos capaces de crear espacios que capaciten a nuestras comunidades para avanzar en la respuesta al sida", afirmó Vince Crisostomo, director ejecutivo de la Coalición de Redes Regionales sobre el VIH/Sida en Asia-Pacífico (Las Siete Hermanas) y presidente de la sesión "Common Ground".

Mi esperanza es que este espacio cumpla la visión de Robert Carr de la unión de todas las personas, independientemente de quiénes sean, qué sean y dónde estén

Vince Crisostomo, director ejecutivo de la Coalición de Redes sobre el VIH y el Sida en Asia y el Pacífico

Según un nuevo informe de ONUSIDA publicado antes del ICAAP 10, las infecciones por el VIH en Asia y el Pacífico siguen concentradas en poblaciones clave: personas que compran y venden sexo, personas que se inyectan drogas, hombres que tienen relaciones con hombres y personas transgénero. La mayoría de los programas para proteger a las poblaciones clave y a sus parejas íntimas frente a la infección por el VIH son inadecuados en tamaño y escala. El informe descubrió que el estigma y la discriminación contra las personas que viven con el VIH y las poblaciones clave siguen estando muy extendidos en toda la región.

En sus comentarios inaugurales, el Sr. Sidibé recordó su reciente visita a la ciudad de Chengdu, en China, donde vio en primera persona el papel fundamental que las organizaciones civiles desempeñan para garantizar el acceso a los servicios para el VIH a las personas que se inyectan drogas y a los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres. "La sociedad civil es el motor de la respuesta al sida, en especial en Asia y el Pacífico", dijo el Sr. Sidibé. "Son necesarias reformas políticas que concedan a dichas organizaciones espacio para su total implicación", añadió.

Los participantes en el diálogo plantearon varios problemas al director ejecutivo de ONUSIDA, incluida la necesidad de un aumento del acceso al tratamiento antirretrovírico en toda la región, así como a fármacos más sencillos, más sólidos y más resistentes. A finales de 2009, más del 60% de las personas aptas para el tratamiento en Asia y el Pacífico no podían acceder a él, según el nuevo informe de ONUSIDA.

La sociedad civil es el motor de la respuesta al sida, en particular en Asia y el Pacífico. Son necesarias reformas políticas que concedan a dichas organizaciones espacio para su total implicación

Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA

Representantes de las organizaciones de profesionales del sexo subrayaron que la criminalización del trabajo sexual sigue siendo un importante problema en toda la región. "A pesar de todas lo dicho sobre la despenalización del trabajo sexual año tras año en las conferencias, solo un país de la región lo ha hecho realmente: Nueva Zelanda", dijo Janelle Fawkes, profesional del sexo y directora general de la Scarlet Alliance, una organización con sede en Australia.

Las leyes y políticas punitivas siguen dificultando la respuesta al sida. El 90 % de los países de Asia y el Pacífico tienen leyes y políticas que impiden que las personas que viven con el VIH y las poblaciones clave con mayor riesgo, accedan a los servicios para el VIH que salvarían sus vidas.

Entre otros problemas presentados en el foro estaba la necesidad de un aumento de la financiación para las organizaciones civiles y la importancia de la protección de los derechos humanos para las poblaciones clave afectadas.