Reportaje

Nuevas directrices para una mejor prevención del VIH en los profesionales del sexo

11 de diciembre de 2012

La Organización Mundial de la Salud (OMS) en colaboración con el UNFPA, ONUSIDA y la Global Network of Sex Work Projects, han desarrollado unas nuevas directrices para proteger mejor a los profesionales del sexo frente al VIH y otras infecciones de transmisión sexual (ITS).

En muchos lugares, los profesionales del sexo son muy vulnerables al VIH y otras infecciones de transmisión sexual (ITS) debido a múltiples factores, incluidos la gran cantidad de parejas sexuales, las condiciones laborables inseguras y las barreras a la negociación de un uso constante del preservativo. Además, con frecuencia los profesionales del sexo tienen un escaso control sobre estos factores debido a la marginalización social y a unos entornos de trabajo criminalizados. El alcohol, el consumo de drogas y la violencia son algunos de los entornos que pueden exacerbar aun más su vulnerabilidad y su riesgo.

"El riesgo de que un profesional del sexo se infecte por el VIH y las ITS es muy superior al de otras personas", dijo el Dr. Gottfried Hirnschall, director del Departamento de VIH/Sida.

El objetivo del documento de orientación, Prevention and treatment of HIV and other sexually transmitted infections for sex workers in low- and middle- income countries (Prevención y tratamiento del VIH y otras infecciones de transmisión sexual para los profesionales del sexo en países de ingresos medios y bajo), es proporcionar recomendaciones técnicas sobre programas eficaces para la prevención y el tratamiento del VIH y otras ITS entre los profesionales del sexo y sus clientes.

La prevención de las infecciones entre los profesionales del sexo tiene el potencial de mejorar la salud de los profesionales del sexo y reducir la transmisión del VIH y las ITS a poblaciones más amplias. Las acciones tempranas en países tan diversos como Brasil, India, Kenya y Tailandia han logrado reducir la transmisión de las ITS en el trabajo sexual mediante el aumento del uso del preservativo, lo que conlleva una mejora de la salud de los profesionales del sexo y un rápido control de las epidemias del VIH y las ITS.

Las nuevas directrices de la OMS recomiendan que los países trabajen por la despenalización del trabajo sexual y les instan a mejorar el acceso de los profesionales del sexo a los servicios sanitarios. También delinean un conjunto de acciones para capacitar a los profesionales del sexo y resaltan que el uso correcto y constante del preservativo puede reducir la transmisión entre profesionales del sexo mujeres, hombres y transgénero y sus clientes.

Los datos indican que allí donde los profesionales del sexo pueden negociar un sexo más seguro, el riesgo y la vulnerabilidad ante el VIH se pueden reducir de forma notable. Las directrices hacen un llamamiento a la realización periódica y voluntaria de las pruebas de detección y al tratamiento de las ITS para mejorar su salud y controlar la transmisión del VIH y las ITS.

Según la OMS, estas directrices basadas en los datos están diseñadas para su uso por los responsables de la salud pública nacional y los directivos de los programas sobre el sida y las ITS, las organizaciones no gubernamentales, incluidas las organizaciones comunitarias y de la sociedad civil, y los profesionales sanitarios. Estas directrices también pueden ser de interés para las agencias de financiación internacionales, los medios de comunicación científicos, los responsables y activistas de las políticas de sanidad.