Reportaje

Yemen: sensibilización sobre el VIH entre los desplazados internos

07 de febrero de 2013

Los líderes comunitarios que representan a los desplazados internos en una reunión con representantes de la ONG, las Naciones Unidas y el gobierno.

A medida que aumenta la presión para mejorar las condiciones de vida en los campos del distrito de Harad de Yemen, los líderes de la comunidad que representan a los desplazados internos se reúnen más a menudo. "Somos 10 en mi tienda, estamos esperando a que lleguen nuevas provisiones, ¿a qué se debe el retraso?", preguntó uno de los líderes.

Los campos de Harad acogen a más de 130.000 personas afectadas por un prolongado malestar social en Yemen. Muchas personas caminan los siete kilómetros que les separan de la frontera de Arabia Saudita con la esperanza de cruzar a un país que se cree que ofrece más oportunidades económicas. Otros confían en los salarios diarios de los trabajos en la construcción, la agricultura y las áreas de pesca, y todavía muchas personas dependen de la comida proporcionada por la comunidad local de acogida.

Sin embargo, la mayoría de la gente no es consciente de que son cada vez más vulnerables a la infección por el VIH al recurrir, en ocasiones, a comportamientos de alto riesgo para satisfacer sus necesidades básicas.

A las autoridades locales les preocupa la falta de información sobre el VIH, por lo que se han asociado con ONUSIDA y con la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) para empezar un programa de sensibilización sobre el VIH para los desplazados.

Debemos promover la integración de las actividades del VIH y la violencia de género en todo el programa humanitario

Ismail Ould Cheikh Ahmed, Coordinador Residente de las Naciones Unidas en Yemen

"Sabemos que el VIH se está intensificando y puede desembocar en una epidemia importante, como hemos visto que ha ocurrido en otros países", afirmó el Dr. Majed Al Gonaid, viceministro de Sanidad. 

Financiado por OCHA, el programa lo llevan a cabo las ONG locales Asociación de Mujeres para el Desarrollo Sostenible (WSAD, por sus siglas en inglés) y la fundación a favor del desarrollo For All Foundation for Development en colaboración con el coordinador de ONUSIDA en el país.

El programa consiste en sesiones de sensibilización sobre el VIH, las enfermedades de transmisión sexual y las competencias esenciales para la vida con el objetivo de que los jóvenes que viven en los campos se protejan del VIH. Además, como parte del programa, 20 jóvenes educadores y educadoras procedentes de los campos y de las comunidades de acogida recibirán formación sobre la prevención del VIH. Por otra parte, también se celebrarán sesiones de sensibilización con líderes comunitarios y religiosos y miembros del consejo local con el objetivo de eliminar el estigma, la discriminación y la violencia de género a la que se enfrentan los que viven en los campos. Por último, se proporcionarán servicios voluntarios de asesoramiento y pruebas del VIH junto con las actividades de sensibilización.

"Estas iniciativas deberían tener lugar en todos los programas humanitarios", enfatizó Renu Chahil-Graf, directora del Equipo de apoyo regional de ONUSIDA para Oriente Medio y África septentrional. "Esperamos que se entiendan como prácticas óptimas para no tener que esperar a que haya paz para llegar a proporcionar servicios del VIH".

Integrar el VIH en la respuesta humanitaria

Ismail Ould Cheikh Ahmed, Coordinador Residente de las Naciones Unidas en Yemen, ha defendido que se preste atención al VIH. "Debemos promover la integración de las actividades del VIH y la violencia de género en el programa humanitario global", afirmó.

De izquierda a derecha: Sabah Badri, directora de la ONG For All Foundation; Renu Chahil-Graf, directora del equipo de apoyo regional de ONUSIDA para Oriente Medio y África septentrional; y Khaled Marh, subdirector del campo.

Un informe sobre sida, seguridad y respuesta humanitaria presentado en la 30.ª Junta Coordinadora del Programa (junio de 2012) enfatiza que un objetivo principal del trabajo de ONUSIDA, copatrocinadores y asociados a la hora de apoyar la respuesta al VIH en emergencias humanitarias ha sido incorporar el sida en la intervención humanitaria global, integrándolo como un problema que requiere un enfoque multidisciplinar. El informe plantea numerosas cuestiones que los gobiernos y las organizaciones necesitan tener en cuenta, como proporcionar a los refugiados y a los desplazados internos un acceso continuado a la terapia antirretrovírica y a servicios de prevención del VIH, así como plantear estrategias que aborden problemas más amplios, como la violencia de género.