Reportaje

Empoderar a los jóvenes brasileños para hablar con sus compañeros sobre el VIH

11 de octubre de 2019

Las infecciones por el VIH en Brasil aumentaron en más de un 20% entre 2010 y 2018, por lo que es crucial que los jóvenes brasileños comiencen a hablar sobre el VIH y aprendan a protegerse. Ese es el objetivo de un proyecto liderado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

A través de una de sus cuentas de redes sociales, Jonas da Silva está al corriente las últimas fiestas y eventos públicos de la localidad de Salvador. También chatea con otros jóvenes. Hablan de sexo, cómo y si usan condones con sus parejas, lo que saben sobre la prevención del VIH y si se han hecho la prueba del VIH. 

«Lo bueno del proyecto es que se trata de gente joven hablando con gente joven. Utilizamos nuestra jerga para abordar el VIH», dice. «Esta conexión es vital. Podemos ver que confían en nosotros, y es cuando sabemos que la información que les hemos proporcionado es la que necesitan».

Él y otros 30 jóvenes se formaron para trabajar como voluntarios en el proyecto local Viva Melhor Sabendo Jovem (VMSJ). Su objetivo es concienciar a los jóvenes sobre la importancia de la prueba y prevención del VIH. Para ello, necesitan estar donde están sus compañeros, en línea y en la calle.

El proyecto sigue el calendario de fiestas y festivales tradicionales que tienen lugar en la calle, especialmente aquellos que atraen a una gran concentración de jóvenes. También responde a demandas específicas de grupos de población clave mediante reuniones públicas donde se reúnen jóvenes del colectivo LGBTI. Con un pequeño y colorido camión, conocido como El Camión de la Pueba, Jonas da Silva y sus co-voluntarios pueden proporcionar privacidad a las personas que deseen asesoramiento y hacerse la pruebas del VIH.

Desde el lanzamiento del proyecto en agosto de 2018, más de 1000 jóvenes de entre 16 y 29 años se han hecho la prueba del VIH en aproximadamente unos 30 viajes realizados por el camión. Como parte de una estrategia para promover las pruebas entre los jóvenes, los voluntarios también facilitan talleres de trabajo sobre el VIH y otras infecciones de transmisión sexual y, además, dan charlas sobre la sexualidad y la salud sexual en las escuelas. Más de 400 estudiantes asistieron a estos eventos durante los primeros seis meses del proyecto.

«La metodología de educación inter pares de VMSJ Salvador permite involucrar a más jóvenes en estas actividades. También les ayuda a concienciarse de la importancia de la prevención y atención del VIH ", dijo Cristina Albuquerque, Jefa de Salud y VIH / SIDA de UNICEF en Brasil. «Los jóvenes que se hacen la prueba durante nuestras actividades agradecen la iniciativa y se quejan de que tienen muy pocas oportunidades de este tipo en la ciudad».

En 2018, de acuerdo a las estimaciones del Ministerio de Salud, los jóvenes de entre 15 y 24 años representaron casi el 15% de todos los nuevos diagnósticos de VIH en el Salvador.

«Para nosotros, los voluntarios, esta experiencia también es importante porque comenzamos a cuidarnos mejor, a aplicar estos métodos de prevención en nuestras vidas y a transmitir el mensaje a quienes nos rodean, a nuestros amigos y familiares», dijo Jonas da Silva.

El proyecto se implementa en asociación con GAPA Bahía, una de las ONG más antiguas que se ocupan de las cuestiones relacionadas con el VIH en el país, y cuenta con el apoyo de la oficina de ONUSIDA en Brasil. Todos los jóvenes voluntarios pasaron por un proceso de selección riguroso antes de someterse al programa de formación en temas como derechos humanos, asesoramiento e información sobre el VIH y otras infecciones de transmisión sexual. También sobre programas basados en la comunidad, el funcionamiento del sistema de salud pública y los servicios de VIH disponibles en el Salvador. La iniciativa incluye una estrategia de formación continua sobre temas relacionados.

«Una de las cosas más importantes que aprendí es que tenemos que respetar las elecciones de cada uno y que estamos aquí solo para ayudar con la información y los aportes que consideremos más apropiados acorde a la historia y el comportamiento de esa persona», dijo Islan Barbosa, otro de los voluntarios.

«El proyecto representa una respuesta importante a la demanda de pruebas del VIH en la ciudad, especialmente entre los grupos de población clave, que a menudo evitan el uso de instalaciones de salud pública para ese propósito. Estamos llevando la prueba del VIH a donde están estas personas», dijo la Sra. Albuquerque.