Reportaje

Reckitt Benckiser dona desinfectante de manos a las personas que viven con el VIH

25 de enero de 2021

En Rusia, los centros de la comunidad para el VIH situados en Moscú, Vorónezh, Kaluga, Kursk, Orel y Vladimir han recibido 35 000 botes de desinfectante de manos Dettol como parte de una iniciativa promovida por Reckitt Benckiser. La donación se hizo en vista de la creciente pandemia de la COVID-19 en el país y del aumento de otras enfermedades de transmisión vírica. Esos botes reflejan el esfuerzo conjunto de la sede de Reckitt Benckiser en la Federación de Rusia y el Equipo de apoyo regional de ONUSIDA para Europa oriental y Asia central. Las organizaciones no gubernamentales Medical Volunteers, Volunteers to Help Orphans y Center Plus también se unieron a la iniciativa y fueron las encargadas de distribuir las donaciones a los centros de la comunidad.

«Se trata de un apoyo que llega en un momento muy oportuno a las personas de los grupos de población clave; a quienes están en riesgo y batallan en primera línea contra ambas epidemias, tanto la del VIH como la de la COVID-19, y a todos aquellos que no tienen la oportunidad de cuidarse solos», insiste Vladimir Mayanovsky, presidente de Center Plus.

De acuerdo con un estudio llevado a cabo por el Central Research Institute of Epidemiology situado en Rospotrebnadzor (el servicio federal para la vigilancia de la protección de los derechos de los consumidores y el bienestar humano) en colaboración con la Coalición internacional de preparación para el tratamiento y siempre con el apoyo de ONUSIDA, el número de personas que viven con el VIH con marcadores para el diagnóstico de la COVID-19 fue cuatro veces superior al hallado en participantes VIH-negativo. Asimismo, la investigación puso de manifiesto que las personas que viven con el VIH tienen dos veces menos posibilidades de que se les realice la prueba de detección del coronavirus y buscan ayuda médica con menos frecuencia que las personas seronegativas, aun presentando síntomas.

El estudio también demostró que la mayoría de los participantes que viven con el VIH presentan un mayor riesgo de contraer la COVID-19 como consecuencia del elevado número de infecciones que hay en su entorno y del menor uso de equipos de protección personal. Del mismo modo, de acuerdo con el estudio, estas personas infravaloran el alto riesgo que presentan ante la enfermedad de la COVID-19.  El desinfectante de manos evita que las personas contraigan la enfermedad del coronavirus.

«La misión de Reckitt Benckiser es proteger, sanar y nutrir, creando un mundo más limpio y más sano. En los países en los que trabajamos, nos esforzamos al máximo por reforzar la importancia de adoptar una actitud responsable con respecto a la salud y considerar que la higiene es la base de un estilo de vida sano. Lavarse las manos es uno de los hábitos más sencillos e importantes. Reckitt Benckiser es más que un negocio, es una forma de contribuir a un futuro más sano y más feliz», destaca Igor Radakovich, director general de Reckitt Benckiser Healthcare en la Federación de Rusia, Ucrania y los países de la Comunidad de Estados Independientes.

«ONUSIDA acoge con agradecimiento y apoya todo este tipo de iniciativas que nacen del sector privado y ayudan a luchar contra las dos epidemias que nos amenazan hoy. Estamos preparados para seguir colaborando con Reckitt Benckiser en materia de salud. Compartimos plenamente la visión que Reckitt Benckiser transmite en el eslogan de todas las iniciativas que promueve en el campo de la educación dentro de la Federación Rusa: "Tu salud es tu responsabilidad". Esto es aplicable no solo al hablar de la prevención de la COVID-19, sino también en lo referente a la prevención del VIH mediante el fomento del uso del preservativo», destaca Alexander Goliusov, director adjunto del Equipo de apoyo regional de ONUSIDA para Europa oriental y Asia central.