Reportaje

La solidaridad mundial y la responsabilidad nacional actúan en Zimbabwe

15 de junio de 2015

Zimbabwe padece una de las mayores epidemias de VIH del mundo, con una prevalencia estimada en adultos del 15 % y 1,4 millones de personas que viven con el VIH. Sin embargo, el país está acelerando sus acciones y aumentando las inversiones en los programas de prevención y tratamiento del VIH.

Como parte de la visita de tres días a Zimbabwe, el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, se reunió con el presidente de Zimbabwe, Emmerson Mnangagwa, para debatir el papel del país en la respuesta al sida.

Durante la reunión, el Sr. Sidibé felicitó al gobierno por los progresos realizados en la ampliación del tratamiento y la prevención y apuntó a la necesidad de acelerar la respuesta al sida para poner fin a la epidemia en Zimbabwe para 2030. Hablaron de garantizar el suministro de medicamentos para mantener sanas a las personas que viven con el VIH, así como a los obstáculos que hay que superar para asegurar que las adolescentes no se dejan de lado.

El Sr. Sidibé también se reunió con los ministros de Sanidad y Atención Infantil y Finanzas y Desarrollo Económico para dialogar con directivos empresariales, sociedad civil y misiones diplomáticas sobre cómo acelerar la respuesta al sida en Zimbabwe.

"El precio de los medicamentos ha caído desde los 10 000 $ por persona al año a menos de 100 $", afirmó el Sr. Sidibé. "Pero, para garantizar que África pueda prestar una respuesta totalmente sostenible al VIH, debe empezar a producir sus propios medicamentos genéricos en lugar de importarlos del extranjero".

Los directivos empresariales presentes ratificaron su compromiso de seguir invirtiendo en la respuesta al sida, incluso aunque el país se enfrenta a graves problemas económicos. Los fabricantes farmacéuticos prometieron seguir buscando maneras de ser más competitivos, de manera que el país pueda tener un papel más importante en la producción de antirretrovíricos y otros medicamentos a fin de reducir su dependencia de las importaciones.

El ministro de Sanidad, David Parirenyatwa, reconoció que la respuesta al sida es una responsabilidad nacional. En 2014 , Zimbabwe solo financió el 15 % de la respuesta con recursos nacionales y dependía enormemente de la financiación de los donantes para salvar la brecha. El ministro reconoció que Zimbabwe debe luchar mucho más contra el estigma y la discriminación. El Sr. Parirenyatwa reafirmó el compromiso del gobierno de crear una estrategia concertada para los programas de aceleración y poner fin a la epidemia de sida para 2030.

Para respaldar su respuesta al VIH, en el año 2000 Zimbabwe introdujo un innovador impuesto del 3 % sobre los ingresos imponibles. En gran parte gracias a este impuesto, la financiación nacional ha aumentado en un 40 % en los últimos tres años. Para garantizar que las contribuciones nacionales a la respuesta nacional de Zimbabwe sigan aumentado, el ministro de Economía, Patrick Chinamasa, declaró: "Zimbabwe mantendrá su impuesto para el sida en el futuro próximo".

El Sr. Parirenyatwa declaró que es importante que a pesar de sus recursos limitados Zimbabwe comparta una parte de sus fondos fiduciarios nacionales para ampliar la respuesta mundial al sida. El gobierno de Zimbabwe entregó al Sr. Sidibe un cheque de 10 000 $ para contribuir al presupuesto básico de ONUSIDA para 2015.