En la pre-conferencia juvenil de Women Delivery, celebrada los días 15 y 16 de mayo en Copenhague (Dinamarca), la embajadora internacional de buena voluntad de ONUSIDA, su alteza real la princesa heredera Mette-Marit de Noruega, insistió en la importancia del papel de las mujeres jóvenes y las adolescentes para poner fin a la epidemia de sida para 2030.

Su alteza real hizo hincapié en que estas debían adoptar papeles de liderazgo en la respuesta al sida, con el fin de que los programas y servicios pudieran desarrollarse para así cubrir sus necesidades específicas, y para asegurar que su salud y derechos sexuales y reproductivos fueran respetados.

El VIH sigue afectando a las jóvenes y las niñas de forma desproporcionada. En 2014, se constataron en el mundo alrededor de 220.000 nuevos casos de adolescentes entre 10 y 19 años infectados por este virus, el 62% de los cuales eran chicas. En el África subsahariana, las adolescentes entre 10 y 19 años representaronn el 72% de los nuevos casos de infección en esta franja de edad.

La pre-conferencia juvenil de Women Deliver es una oportunidad crucial para los jóvenes activistas en la respuesta al VIH, para hacerse escuchar en la fase previa a la Reunión de alto nivel sobre el sida de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que se celebrará del 8 al 10 de junio en Nueva York (EE.UU.). También es una buena oportunidad para cientos de jóvenes activistas para evaluar programas como la iniciativa All In to #EndadolescentAIDS y para esbozar formas de asegurar que los jóvenes participen más en el desarrollo.

La princesa se ha implicado en la respuesta al sida desde 2003 y es una gran defensora de la participación de los jóvenes y el empoderamiento de las mujeres. La princesa Mette-Marit visitó recientemente la República Unida de Tanzanía para evaluar el progreso realizado a la hora de eliminar la transmisión materno infantil del VIH y para ver cómo se comprometían los jóvenes con la respuesta al sida.