La discoteca estaba abarrotada. Había gente bailando, música alta y algo que normalmente no vemos en este ambiente: una conversación intensa.

El evento inaugural de la iniciativa #BeFree de la primera dama reunió a jóvenes, padres, consejeros, bailarines, músicos, líderes religiosos, expertos de la salud, asociados de las Naciones Unidas y otros actores de la comunidad en un acto vespertino celebrado en una discoteca en Windhoek (Namibia). El objetivo de #BeFree es ofrecer a los jóvenes la información, los conocimientos y las herramientas necesarias para su transición a la edad adulta.

La primera dama de Namibia, Mónica Geingos, que hace poco fue nombrada defensora especial de ONUSIDA para las mujeres jóvenes y las adolescentes, impulsa el programa Start Free, Stay Free, AIDS Free. Geingos quería crear un entorno en el que los jóvenes pudieran sentirse cómodos para hablar de los retos a los que se enfrentan durante su crecimiento, así como de lo que necesitan para sentirse capacitados para tomar decisiones inteligentes.

Un padre llevó a sus hijas al evento y, cuando escuchó a algunos de los más de cien participantes de entre 15 y 24 años que habían acudido y se dio cuenta de que hablaban con el corazón, también se quedó. En el grupo de debate se trató una amplia gama de temas: la anticoncepción, la capacitación económica, el VIH y otras infecciones de transmisión sexual y la necesidad de combatir la violencia de género. Se animó a los jóvenes a que compartieran sus propias experiencias, ante la presencia de algunos terapeutas dispuestos a brindar asesoramiento y atención. No se oía ni una mosca cuando un joven relató su historia sobre las consecuencias de las malas decisiones que cambiaron su vida para siempre y lo convirtieron en un preso del centro penitenciario de Windhoek.