Reportaje

La campaña para la realización de la prueba del VIH reúne a los habitantes de Bangui

19 de febrero de 2019

El barrio PK5 de Bangui (República Centroafricana) es el hogar de una gran parte de la comunidad musulmana de la ciudad.  Mientras que antes se trataba de un área comercial muy concurrida y era el centro de la vida nocturna de Bangui, ahora se ha convertido en una zona de exclusión para muchos.

Como sucedió en gran parte del país, este barrio y sus residentes se vieron gravemente afectados por la violencia que azotó el país entre 2012 y 2013.  Esto desembocó en que los habitantes que no practican la religión musulmana abandonaran el barrio y que, a día de hoy, los grupos armados rivales continúen ejerciendo el control.  En todo el país, las consecuencias de la violencia han propiciado el desplazamiento de grandes masas de población y una crisis humanitaria. A finales del año 2018, se estimó que 2,9 millones de personas, más de la mitad de la población del país, necesitaban ayuda humanitaria y protección.

Sin embargo, la gente que habita el PK5 se mantiene firme. Tras percibir la necesidad de una mayor concienciación sobre el VIH en la comunidad, los dirigentes juveniles musulmanes y el Catholic University Center, con el apoyo de ONUSIDA, organizaron una campaña de sensibilización y de realización de pruebas del VIH del 23 de enero al 13 de febrero en el hospital Henri Dunant en el PK5.

Esta ha sido la primera de este tipo que ha tenido lugar en la zona desde los conflictos acontecidos entre 2012 y 2013. En las dos semanas que duró la campaña, 1500 personas se realizaron voluntariamente las pruebas del VIH y accedieron a los servicios de asesoramiento. De esta forma, se asignó el tratamiento pertinente a aquellos que obtuvieron un resultado positivo. 

El encargado de dar comienzo a la campaña fue Pierre Somse, Ministro de Sanidad, durante un evento al que asistieron líderes religiosos, mujeres y jóvenes. Este ministro se sometió a la prueba del VIH y señaló la importancia de que todas las personas sepan su estado serológico. Las estadísticas de conocimiento de este siguen siendo muy bajas, ya que solo el 53 % de las personas que viven con el VIH son conscientes de su estado.

«El gobierno se ha comprometido a aumentar los esfuerzos dedicados a proporcionar servicios sanitarios y sociales para toda la población centroafricana. No hemos olvidado la delicada situación que se sufre en el PK5 y no se dejará de lado a su población en nuestro intento de facilitar el acceso a las pruebas, el tratamiento, la atención y el apoyo del VIH», dijo Pierre Somse.

Pamela Ganabrodji, Directora de Información y Asesoramiento en el hospital Henri Dunant, añadió lo siguiente: «Estamos muy orgullosos de todo lo que hemos conseguido con esta campaña contra el VIH, pero los desafíos siguen ahí. Nos dirigimos al gobierno y a los colaboradores internacionales para que continúen financiando las actividades contra el VIH destinadas a mejorar los cuidados de salud sexual y reproductiva del hospital Henri Dunant, que son fundamentales en una comunidad en la que los tabúes sociales y culturales suponen una gran barrera».

El último día de la campaña, la población se reunió para tratar los desafíos que afronta la gente del PK5 con respecto al VIH y a la salud sexual y reproductiva. Se ha llegado a la conclusión de que se necesita mejorar los servicios sociales y de atención sanitaria básica, así como suplir la ausencia de oportunidades económicas que sufre la población. Esto se debe a que el escaso acceso a los anticonceptivos actuales, el desconocimiento sobre qué es el VIH y la pobreza siguen propiciando la vulnerabilidad ante el VIH de los jóvenes y las mujeres.

«Con esta campaña, nosotros, los jóvenes del PK5, demostramos que no estamos indefensos y que formamos parte de la solución para el problema del VIH y otras cuestiones sociales», dijo Aroufay Abdel Aziz, Presidente de la Juventud Musulmana de la República Centroafricana.

La segunda fase de la campaña de sensibilización y de realización de pruebas del VIH se prolongará hasta finales de marzo. Esta incluirá mensajes de prevención junto con las tareas de concienciación llevadas a cabo por educadores entre iguales y debates en grupos sobre el VIH y otras cuestiones de salud sexual y reproductiva.

«ONUSIDA seguirá cooperando con el gobierno y con otros organismos de las Naciones Unidas para reforzar la participación de los jóvenes en la respuesta al VIH», dijo Patrick Eba, el Director Nacional de ONUSIDA para la República Centroafricana.