PCB Programme Coordinating Board

La sesión de la Junta de Coordinación del Programa de ONUSIDA sobre el envejecimiento y el VIH reafirma que el envejecimiento del grupo de personas que viven con el VIH es una muestra de su éxito

12 de diciembre de 2016

El 8 de diciembre, la sesión temática del 39º encuentro de la Junta de Coordinación del Programa de ONUSIDA (JCP) se centró en el envejecimiento y el VIH.

De los 36,7 millones de personas que vivían con el VIH en 2015, 5,8 millones tenían una edad igual o superior a 50 años.  Con la expansión del acceso al tratamiento, más personas que viven con el VIH sobreviven y envejecen.

La sesión temática de la JCP reunió a representantes de la sociedad civil, a gobiernos y a agencias de desarrollo con el fin de conocer tanto las experiencias de las personas que viven con el VIH de más de 50 años de edad como los sistemas comunitarios, sanitarios y de protección social para las personas mayores.

La respuesta al VIH debe continuar siendo favorable para que el acceso al tratamiento se expanda de forma equitativa, mediante una prestación de servicios integrales de salud, adaptados a las diferentes edades y personas.  Además, se debe apoyar a las personas que viven con el VIH para que puedan disfrutar de una vida sana y longeva. Asimismo, las personas de una edad igual o superior a 50 años deberían tener un acceso igualitario al empleo y la integración y protección social.

La sesión temática también analizó las vulnerabilidades de las personas mayores de 50 años frente al VIH, así como la importancia de que la prevención, las pruebas y la adhesión a programas de atención se adapten a la edad. Las personas mayores de 50 años tienen las mismas necesidades en materia de prevención que los jóvenes.

La diversidad de personas mayores de 50 años fue otro asunto que surgió durante el encuentro.  Se realizó un llamamiento en favor de los servicios de tratamiento, prevención, atención y apoyo que respondan a las necesidades específicas de las personas que consumen drogas y los trabajadores sexuales de mayor edad, los gais y los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, y las personas transgénero.

Durante esta sesión también se debatió cómo se podría aprender de las experiencias de las personas mayores de 50 años que viven con el VIH o que tienen riesgo de infección por el VIH, y cómo se podrían aplicar estos conocimientos para conseguir una respuesta efectiva al VIH.  Los participantes confirmaron la necesidad de un enfoque basado en el ciclo vital y de un sistema de salud bien equipado que pueda prevenir y satisfacer las necesidades de las personas que viven con el VIH o están en riesgo de infección por el VIH a medida que envejecen.

Entre las tareas futuras se incluye la investigación de los efectos físicos causados por envejecer con el VIH, los efectos a largo plazo de la terapia antirretrovírica y las innovaciones que puedan asegurar un acceso al tratamiento ininterrumpido, de calidad y para todos.

El compromiso significativo de las personas mayores que viven con el VIH puede respaldar la respuesta nacional, regional y mundial al VIH con el fin de asegurar que las personas mayores que viven con el VIH puedan disfrutan de una vida longeva y sana.

La Junta de ONUSIDA enfatiza la necesidad de financiar totalmente la respuesta al VIH para que más países puedan sumarse a la Acción Acelerada para poner fin a la epidemia de sida para 2030

12 de diciembre de 2016

GINEBRA, 12 de diciembre de 2016. En su 39ª sesión, la Junta de Coordinación del programa de ONUSIDA acogió con beneplácito los importantes progresos realizados en la respuesta al VIH y subrayó la necesidad de una inversión continuada, de un compromiso reforzado, de asociaciones y de innovación que permitan que un número mayor de países pueda acelerar la prestación de servicios para poner fin a la epidemia de sida para 2030.

En su discurso inaugural, el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, hizo balance de un año crucial en la respuesta al sida, en el que el acceso al tratamiento antirretrovírico se ha ampliado hasta alcanzar a más de 18 millones de personas, y en el que, además, un número mayor de países ha adoptado una respuesta acelerada para poner fin a la epidemia de sida para el año 2030. Esta incluye un conjunto de objetivos cuantificables que deben haberse alcanzado en 2020 para que sea posible poner fin a la epidemia de sida para 2030.

Sidibé enfatizó la necesidad de continuar respondiendo a los problemas subyacentes que aumentan la vulnerabilidad de las personas a la infección por el VIH, en especial entre ciertos grupos de personas, incluidas las mujeres jóvenes y las adolescentes y los grupos de población clave. Entre estos últimos se encuentran los trabajadores sexuales, las personas transgénero, los gais y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, los reclusos y los usuarios de drogas inyectables. Asimismo, anunció su intención de crear una nueva coalición para la prevención mediante diversas iniciativas y con la ayuda de diversos líderes, ejecutores y representantes de la comunidad comprometidos a disminuir las carencias en materia de prevención. 

A pesar de los progresos realizados en la respuesta al VIH, Sidibé llamó la atención sobre los nuevos retos mundiales que amenazan con ralentizar el rumbo de la respuesta acelerada.

"Es esencial que los países continúen teniendo acceso a recursos a largo plazo que sean predecibles y sostenibles", afirmó Sidibé. "De otro modo, no serán capaces de apoyar y acelerar sus respuestas al VIH, y podría haber un repunte de la epidemia de sida en los próximos años".

Durante su reunión de tres días, la Junta señaló el déficit de compromisos de financiación para apoyar el trabajo de ONUSIDA y destacó la necesidad de que el Programa Conjunto esté totalmente financiado. Al mismo tiempo, la Junta pidió una intensificación de los esfuerzos para eliminar las nuevas infecciones entre los niños y para mantener a sus madres con vida, con el fin de alcanzar los objetivos establecidos en la Declaración Política para poner fin al sida de 2016 y en el plan Start Free, Stay Free, AIDS Free. La Junta acogió con beneplácito el exitoso reabastecimiento del Fondo Mundial de lucha contra el sida, la tuberculosis y la malaria. Asimismo, hizo un llamamiento para incrementar las inversiones en la prestación de servicios sanitarios comunitarios y en los asociados de la sociedad civil involucrados en la respuesta al VIH, así como para consolidar otro tipo de medidas encaminadas a aumentar la participación de la comunidad.

La Junta hizo hincapié en cómo los líderes de la comunidad desempeñarán un papel aún más importante en relación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, los cuales requieren de respuestas inclusivas que lleguen a las personas con mayor riesgo de quedar olvidadas.  Desde el principio, la respuesta de la comunidad ha estado a la vanguardia de la respuesta al VIH, pero esta no es un sustituto de la respuesta nacional, sino que constituye una parte fundamental de los planes de ejecución nacionales basados en hechos, en especial en lo que respecta a la respuesta acelerada.

Durante el día dedicado a este tema, la Junta se centró en el estado de la epidemia en las personas con una edad superior a los 50 años que viven con el VIH y en aquellas en riesgo de contraer la infección por el VIH, en el impacto de envejecer con el VIH y en las respuestas del sector social y sanitario a estos aspectos. La Junta se mostró de acuerdo en apoyar tanto programas como sistemas sanitarios que suplan por completo las necesidades de un número cada vez mayor de personas con una edad igual o superior a 50 años que viven con el VIH.

A la sesión, que estuvo presidida por Suiza, acudieron representantes de los Estados Miembros, de organizaciones internacionales, de organizaciones no gubernamentales y de la sociedad civil.  Ghana ejerció de vicepresidente y, Ecuador, de ponente.

Tanto el informe del Director ejecutivo de ONUSIDA como las decisiones de la Junta se encuentran disponibles en unaids.org. 

ONUSIDA

El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) lidera e inspira al mundo para hacer realidad su meta global de cero nuevas infecciones por el VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el sida. ONUSIDA aúna los esfuerzos de 11 organizaciones de las Naciones Unidas (ACNUR, UNICEF, PMA, PNUD, UNFPA, UNODC, ONU Mujeres, OIT, UNESCO, OMS y Banco Mundial) y trabaja en estrecha colaboración con asociados mundiales y nacionales para poner fin a la epidemia de sida para el 2030 como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Obtenga más información en unaids.org y conecte con nosotros a través de Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.

Contacto

UNAIDS Geneva
Michael Hollingdale
tel. +41 22 791 5534
hollingdalem@unaids.org

Documents of the meeting

Decisions

 

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Actuar para invertir en las respuestas comunitarias al VIH

01 de julio de 2016

El papel de las comunidades es esencial en la respuesta a la epidemia de sida. El activismo de las comunidades, la prestación de servicios y la participación en la toma de decisiones han conformado todos los aspectos de la respuesta mundial al sida.  Sin embargo, muchas redes comunitarias y organizaciones de la sociedad civil están luchando por financiar su trabajo y con demasiada frecuencia las voces de las comunidades no se incluyen de forma significativa en los diálogos sobre políticas, en particular las voces de las poblaciones clave.

A fin de identificar los pasos concretos para incluir y financiar mejor las respuestas comunitarias, más de 20 ponentes se reunieron en Ginebra (Suiza) el 30 de junio en el día temático de la Junta Coordinadora del Programa de ONUSIDA. La sesión temática llevaba por título "El papel de las comunidades para poner fin al sida para 2030" e incluyó a ponentes de la sociedad civil, los gobiernos, los socios de desarrollo y del ámbito académico.

Mientras que debe reforzarse la respuesta de las comunidades, incluidos el activismo y la prestación de servicios basados en la comunidad, muchas organizaciones comunitarias no reciben el apoyo que necesitan para implicarse plenamente. En una reciente encuesta de ONUSIDA a las organizaciones civiles, el 42 % de los encuestados notificó un descenso en sus presupuestos desde 2013, mientras que otro 26 % dijo que sus presupuestos habían permanecido igual. Las organizaciones más pequeñas dijeron que sufrían mucho por los recortes, mientras que la financiación disminuía o permanecía igual para todos los tipos de actividad. Las organizaciones centradas en el activismo eran las más afectadas.

Existen datos sólidos acerca de que la respuesta de las comunidades produce resultados y ONUSIDA reconoce que existe una necesidad urgente de ampliarlas e integrarlas plenamente en las respuestas nacionales. Las políticas de financiación, los marcos reglamentarios nacionales y la inhibición de los entornos jurídicos deben revisarse para eliminar las barreras que impiden el flujo de financiación desde las fuentes nacionales e internacionales hacia las organizaciones de la sociedad civil. Los participantes destacaron que la respuesta de las comunidades debe integrarse plenamente y que estas convertirse en socios igualitarios para prestar servicios igualitarios, basados en datos, sensibles a los problemas de género y accesibles para todos aquellos que las necesitan.

Durante los últimos años, ONUSIDA ha presentado una serie de informes sobre la necesidad de una mayor inclusión de, e inversión en, la respuesta de las comunidades, incluidas Los gobiernos financian a las comunidadesInvertir en activismoMás fuertes juntosLa participación de las comunidades y Administración comunitaria del tratamiento antirretrovírico.

 

Citas

"Es mejor consultar a las personas afectadas en la comunidad antes de empezar nada; deben participar".

Kritima Samitpol Tangerine Community Health Centre, Bangkok (Tailandia)

"El activismo es cuando decimos que no podemos aceptar lo que existe y trabajamos para cambiarlo. El activismo es el software para el hardware de los servicios".

Sergey Votyagov Director ejecutivo de la Red euroasiática de reducción de daños

"Mi preocupación es que si no cambiamos la manera actual de hacer las cosas, no lograremos el paso de la inclusión a la plena integración de la respuesta comunitaria en los planes nacionales. Y con la inclusión debe haber la financiación necesaria para dar apoyo pleno a la respuesta de las comunidades y para aprovechar la energía y la experiencia comunitarias".

Michel Sidibé Director ejecutivo de ONUSIDA

Debemos escuchar sus voces porque hacerlo nos hace mejores a nosotros y a nuestros programas".

Deborah Birx Coordinadora Mundial de los Estados Unidos para el Sida y Representante Especial para la Diplomacia Sanitaria Mundial

“Hoy se trata de iniciar el cambio. Queremos hablar acerca del programa político para incorporar mejor la respuesta de las comunidades y financiar dicha respuesta".

Christine Stegling Directora ejecutiva de la Alianza Internacional contra el VIH/Sida

La Junta de ONUSIDA subraya la necesidad de acelerar la acción y aumentar la inversión para poner fin a la epidemia de sida para 2030

01 de julio de 2016

GINEBRA, 1 de julio de 2016—En su 38ª reunión, la Junta Coordinadora del Programa de ONUSIDA ha recalcado la necesidad de acelerar la acción, aumentar la inversión, intensificar las colaboraciones y la innovación en la prestación de servicios liderados por la comunidad para poner fin a la epidemia de sida para 2030.

La reunión se celebró solo semanas después de la adopción por los estados miembros de las Naciones Unidas de una nueva Declaración Política para poner fin al sida, la cual hizo un llamamiento a los países para acelerar su respuesta al VIH en los próximos años a fin de alcanzar un conjunto de objetivos cuantificables para 2020. Lograr esos objetivos es esencial para poner al mundo en la vía de acabar con el sida como amenaza para la salud pública para 2030.

En su intervención de apertura, el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, describió la Declaración Política acordada en Nueva York como audaz, ambiciosa, con visión de futuro y equilibrada. Afirmó que el éxito a la hora de lograr los objetivos de la Declaración Política requería un enfoque inclusivo que no dejara a nadie atrás, respeto por el derecho de todas las personas a acceder a la salud y los derechos sexuales y reproductivos, una implantación innovadora y apropiada de programas y servicios que satisfagan las necesidades de las regiones y las poblaciones clave afectadas de diversas maneras y aumento y anticipo de las inversiones para la respuesta al sida.

"El compromiso para poner fin a la epidemia de sida para 2030 debe apoyarse en el total respeto a los derechos humanos de las personas, incluido su acceso a una salud y unos derechos sexuales y reproductivos de calidad", declaró el Sr. Sidibé. "La implicación de las personas que viven con y están afectadas por la epidemia es esencial para implantar una respuesta eficaz y totalmente financiada basada en la comunidad y para garantizar una fuerte conexión entre los proveedores de servicios y las personas más afectadas por el VIH".

La Junta también aprobó un Marco de presupuesto unificado, resultados y responsabilidad (UBRAF) para 2016-2021 con el fin de traducir la Estrategia 2016-2021 de ONUSIDA en acciones a nivel nacional, regional y mundial. Sin embargo, sigue existiendo un déficit del 30 % en 2016 entre los compromisos de financiación realizados hasta la fecha y los recursos necesarios para implantar totalmente la Estrategia en apoyo de las personas que viven con o están afectadas por el VIH. La Junta animó a los gobiernos donantes a realizar varias contribuciones anuales al UBRAF 2016-2021 e instó a ONUSIDA a seguir ampliando su base de donantes. Durante la reunión, los Estados Unidos de América anunciaron que pretendían ampliar su acuerdo con ONUSIDA durante cinco años más y, como parte de esta ampliación, pretendían impulsar su colaboración de financiación con ONUSIDA.

Durante el día temático, la Junta analizó con más profundidad el papel clave de las comunidades para poner fin al sida para 2030, instando a los gobiernos a aprovechar las capacidades, conocimientos y experiencia de la sociedad civil para ampliar al máximo su impacto. Hubo un consenso general en torno a la idea de que no se pondría fin a la epidemia de sida para 2030 sin una inversión sostenida e intensificada en las respuestas lideradas por la comunidad a la epidemia en las regiones y entre los grupos de personas más afectadas, incluidos profesionales del sexo, hombres homosexuales y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, personas que se inyectan la droga, personas transgénero y reclusos.

Representantes de los estados miembros, organizaciones internacionales, sociedad civil y organizaciones no gubernamentales asistieron a la reunión, que estuvo presidida por Suiza. Ghana ocupó la vicepresidencia y Ecuador actuó como relator.

El informe del director ejecutivo de ONUSIDA a la Junta y las decisiones de esta última pueden encontrarse en unaids.org.

 

ONUSIDA

El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) lidera e inspira al mundo para hacer realidad su meta global de cero nuevas infecciones por el VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el sida. ONUSIDA aúna los esfuerzos de 11 organizaciones de las Naciones Unidas (ACNUR, UNICEF, PMA, PNUD, UNFPA, UNODC, ONU Mujeres, OIT, UNESCO, OMS y Banco Mundial) y trabaja en estrecha colaboración con asociados mundiales y nacionales para poner fin a la epidemia de sida para el 2030 como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Obtenga más información en unaids.org y conecte con nosotros a través de Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.

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Ghana continúa esforzándose para hacer del fin del sida una realidad en el país

15 de febrero de 2016

Tras el reciente nombramiento de Ghana como vicepresidente de la Junta de Coordinación del programa de ONUSIDA  (JCP) para el 2016, el presidente del país, John Dramani Mahama, insistió en que aumentar la promoción, la asociación y la inversión en la respuesta al sida producirá resultados que van más allá de la salud. Estos esfuerzos mejorarán también otros resultados de la Agenda de Desarrollo Sostenible relacionados con cuestiones de género, derechos y desarrollo.

Durante las conversaciones con Jan Beagle, directora ejecutiva adjunta de ONUSIDA, que se encontraba de visita, el presidente Mahama afirmó que la autocomplacencia tiene que abordarse aumentando las iniciativas basadas en pruebas y derechos, los programas y los servicios. Una manera de hacerlo es incrementar la capacidad de producción local de terapia antirretrovírica.

Ghana ha hecho progresos significativos en su respuesta al sida a través de respuestas al VIH multisectoriales que ejemplifican las lecciones aprendidas por África Occidental. Ghana ha reducido las nuevas infecciones por el virus en un 53% entre 2001 y 2014, y las muertes relacionadas con el mismo en un 45% durante el mismo periodo. Según las encuestas demográficas y de salud de 2008 y 2014, las pruebas del VIH entre mujeres se duplicaron entre 2008 y 2014.

Durante su estancia en Ghana, la Sra. Beagle se reunió con las partes interesadas del gobierno, la sociedad civil y socios internacionales para preparar la vicepresidencia de la JCP del país, así como su papel en la Reunión de alto nivel celebrada en la Asamblea General de las Naciones Unidas para acabar con el sida.

Para dar la bienvenida a Ghana en su nueva función en la JCP, la Sra. Beagle elogió la estrategia exhaustiva e intersectorial del país que ha mostrado colaboración entre los sectores gubernamentales de salud, educación, género, cultura y justicia. Resaltó la importancia de centrarse continuamente en tratar los factores sociales del VIH en Ghana y en el resto de la región occidental africana, destacando el deber para con determinadas poblaciones clave de mayor riesgo , incluidas, especialmente, las chicas adolescentes.

El ministro de Sanidad Alexander Segbefia destacó que centrarse en la respuesta en los lugares y las poblaciones clave de mayor riesgo permitirá a Ghana sacar provecho de lo ya logrado, mantener el impulso y encaminarse hacia una generación libre de sida.

Citas

"Este no es el momento de bajar la guardia. Este es el momento de intensificar nuestras respuestas para conseguir acabar con el sida. Nos honra haber sido nombrados como vicepresidentes de la Junta Coordinadora del Programa y desempeñaremos nuestro papel de manera muy efectiva junto con ONUSIDA, nuestro firme asociado en el camino hacia el éxito."

John Dramani Mahma, presidente de Ghana

"La estrategia de Ghana, que supone la colaboración entre los sectores gubernamentales, es impresionante y está impulsando el cambio. Como vicepresidente, Ghana aportará experiencia y energía a la Junta Coordinadora del Programa. Estamos deseando contar con el apoyo de Ghana para crear una declaración política sólida en la Reunión de alto nivel sobre el fin del sida para contribuir a hacer realidad este objetivo."

Jan Beagle, directora ejecutiva adjunta de ONUSIDA

"Con la asunción de Ghana del cargo de vicepresicente de la Junta Coordinadora del Programa, sin duda trabajaremos arduamente para justificar la confianza depositada en nosotros. Estamos comprometidos a colaborar estrechamente con ONUSIDA para conseguir nuestro objetivo común de lograr un mundo libre de sida para el 2030".

Alexander Segbefia, ministro de Sanidad de Ghana

Cooperación y soluciones colectivas para una respuesta sostenible al VIH

30 de octubre de 2015

La Junta Coordinadora del Programa de ONUSIDA reclamó el aumento de la solidaridad mundial y la responsabilidad compartida con el propósito de poner fin a la epidemia de VIH para el año 2030 durante la sesión temática calebrada el 28 de octubre en Ginebra, Suiza.

La sesión temática, parte del 37º encuentro de la Junta, reunió a distinguidos oradores representantes de gobiernos, de la sociedad civil, del sector privado y de la comunidad internacional con el fin de informar el debate sobre una respuesta sostenible al sida.

En su discurso inaugural, Ibrahim Assane Mayaki, director ejecutivo de la Agencia de Coordinación y Planificación de la Nueva Alianza para el Desarrollo de África (NEPAD), dijo que el único mecanismo de gobernanza que produjo una respuesta eficaz al sida debería repetirse en cuestiones de salud más generales.

Los participantes coincidieron en que las metas relacionadas con el sida en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU podrían alcanzarse solo a través de un enfoque acelerado que esté adecuadamente financiado, que sea equitativo y que responda a las necesidades de poblaciones clave con mayor riesgo de infección por el VIH.

En los últimos años, varios países han aumentado sus inversiones nacionales relacionadas con el virus VIH a través de distintos mecanismos, incluyendo el pago de impuestos, y han concentrado sus recursos en Programas de Alto Impacto. No obstante, todavía se necesitaría una importante financiación adicional para lograr el objetivo de conseguir el tratamiento 90-90-90 para el año 2020.

Los participantes también llegaron a la conclusión de que las respuestas comunitarias son fundamentales para la gobernanza y la aplicación de la respuesta al sida, y que la garantía de la participación efectiva de la sociedad civil, las personas que viven con el VIH y otras poblaciones clave en los procesos de elaboración de políticas públicas es indispensable.

“La inversión estratégica en las respuestas comunitarias no se logrará sin cambios estructurales en la forma en que los gobiernos y los donantes asignan fondos. Necesitamos una manera sistemática para asegurar que la financiación llegue a los grupos comunitarios”, dijo Alessandra Nilo, cofundadora y directora ejecutiva de Gestos, una organización contra el sida ubicada en Brasil. También añadió que “ Los indicadores de inclusión la capacitación de todas las personas, la transparencia, la promoción y la garantía de políticas basadas en los derechos serán fundamentales”.

Al clausurar la sesión, Luiz Loures, director ejecutivo adjunto de ONUSIDA, destacó que el secreto para lograr los ODS reside en la innovación de los medios de aplicación. Reforzar los componentes de la responsabilidad compartida: La financiación y la gobernanza, para de esta forma garantizar la eficiencia, serán los factores decisivos para alcanzar un final del virus VIH en el que nadie se quede excluido.

La Junta del ONUSIDA adopta una estrategia audaz y ambiciosa para poner fin a la epidemia de sida para el 2030

30 de octubre de 2015

GINEBRA, 30 de octubre de 2015 — En su 37ª reunión, la Junta de Coordinación del ONUSIDA aprobó una nueva estrategia para poner fin a la epidemia de sida en cuanto amenaza para la salud pública para el 2030. La estrategia de ONUSIDA para 2016-2021 es una de las primeras del sistema de las Naciones Unidas que se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que establecen el marco de la política de desarrollo mundial para los próximos 15 años, y entre los que se incluye poner fin a la epidemia de sida para el 2030.

Con una agenda universal, firmemente basada en datos y en la defensa de los derechos, la estrategia fija el enfoque de la Respuesta Rápida de ONUSIDA para acelerar la respuesta al sida durante los próximos cinco años y así alcanzar los objetivos esenciales de prevención y tratamiento del VIH y la cero discriminación. Miembros de la Junta de todas las regiones consideraron la estrategia audaz y ambiciosa, pero alcanzable, y alabaron el proceso resueltamente inclusivo y consultivo para llevarla a cabo.

En su discurso de apertura, el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, describió la estrategia como un llamamiento urgente a una inversión de peso para cerrar la brecha de las pruebas, aumentar la atención y la financiación para la prevención del VIH y proteger la salud de los 22 millones personas que viven con el VIH que aún no están en tratamiento. También afirmó que la estrategia será un instrumento en pro de la justicia social y la dignidad.

«Nuestra estrategia es transformadora y nos empuja a abarcar más terreno que nunca antes —declaró el Sr. Sidibé—. Esto nos obliga a abordar los vínculos fundamentales que hay entre salud, injusticia, desigualdad, pobreza y conflicto.»

La Junta también aprobó el Marco operativo y el Marco de Presupuesto Unificado, Resultados y Responsabilidad (UBRAF) de ONUSIDA para el período 2016-2021, que supondrá aplicar la estrategia a escala nacional, regional y mundial. La estrategia y el marco UBRAF son poderosas herramientas para acelerar la respuesta mundial al sida y orientar la labor de ONUSIDA.

La Junta subrayó la importancia de la innovación y la colaboración para hacer frente a complejos desafíos interconectados de desarrollo y salud e hizo hincapié en que el espacio para el diálogo que ofrecen la estrategia y el ONUSIDA es único.

Durante esa jornada temática, la Junta debatió sobre la importancia de la responsabilidad común y la solidaridad mundial para que la respuesta al VIH sea eficaz, equitativa y sostenible. Todos coincidieron en que el próximo paso fundamental para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible será tener claridad sobre los medios de ejecución. Los participantes resaltaron que la multisectorialidad y una gobernanza equitativa, transparente e inclusiva son esenciales para una efectiva responsabilidad común y solidaridad mundial, y que la respuesta al sida —y en particular el ONUSIDA— ofrece un valioso modelo que debería replicarse para otros objetivos de salud, desarrollo, género y derechos.

A la reunión asistieron representantes de los Estados Miembros, organizaciones internacionales, la sociedad civil y organizaciones no gubernamentales. Estuvo presidida por David Parirenyatwa, ministro de Salud y Bienestar Infantil de Zimbabwe; Suiza ocupó la vicepresidencia y Ucrania, la relatoría. Se decidió que en 2016 el país helvético presidirá la reunión, con Ghana en la vicepresidencia y Ecuador en la relatoría.

El informe presentado por el director ejecutivo del ONUSIDA a la Junta y las decisiones adoptadas por esta pueden consultarse en unaids.org.

ONUSIDA

El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) lidera e inspira al mundo para hacer realidad su meta global de cero nuevas infecciones por el VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el sida. ONUSIDA aúna los esfuerzos de 11 organizaciones de las Naciones Unidas (ACNUR, UNICEF, PMA, PNUD, UNFPA, UNODC, ONU Mujeres, OIT, UNESCO, OMS y Banco Mundial) y trabaja en estrecha colaboración con asociados mundiales y nacionales para poner fin a la epidemia de sida para el 2030 como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Obtenga más información en unaids.org y conecte con nosotros a través de Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.

37ª reunión de la Junta Coordinadora del Programa de ONUSIDA

26 de octubre de 2015

La 37ª reunión de la Junta Coordinadora del Programa de ONUSIDA (JCP) se celebra en Ginebra (Suiza) del 26 al 28 de octubre.

Durante la sesión de apertura, el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, se dirigió a la Junta para ofrecer una actualización de los progresos realizados en la respuesta al sida, así como para subrayar los problemas y oportunidades para acelerar un movimiento mundial que ponga fin a la epidemia de sida para 2030.

El Sr. Sidibé declaró que la reunión de la JCP se celebraba en un momento importante, poco después de que la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptara los Objetivos de Desarrollo Sostenible que impulsarán el programa de desarrollo durante los próximos 15 años Afirmó que es fundamental renovar el compromiso mundial para poner fin a la epidemia de sida como amenaza para la salud pública. "La cuenta atrás hacia 2030 ha empezado y nos obliga a trabajar de manera diferente", declaró.

La JCP estudiará la Estrategia de ONUSIDA 2016-2021 durante su reunión. El segmento temático se celebrará el 28 de octubre y se centrará en la responsabilidad compartida y la solidaridad global para una respuesta al VIH eficaz, igualitaria y sostenible durante el programa posterior a 2015.

La 37ª reunión de la JCP de ONUSIDA está presidida por Zimbabwe, mientras Suiza actúa de vicepresidente y Ucrania de relator.

Fomentar una mayor atención al VIH en las emergencias humanitarias

06 de julio de 2015

Las estrategias y los trabajos contra el sida deben dar una mayor prioridad a las emergencias humanitarias y a los millones de personas afectadas, esto es lo que acordaron los miembros del organismo directivo de ONUSIDA en el segmento temático de las 36ª reunión de la Junta Coordinadora del Programa (JCP) de ONUSIDA, que se celebró el 2 de julio en Ginebra (Suiza).

Los nuevos datos presentados en la sesión temática por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el secretariado de ONUSIDA estiman que de los 314 millones de personas afectadas por emergencias humanitarias en 2013, 1,6 millones - o 1 de cada 22 - viven con el VIH, y muchos miles más están en riesgo.

"Hablamos de una cantidad increíble de personas y de varias capas de vulnerabilidad. La escala y el impacto son demasiado grandes como ser obviados. Debemos garantizar que los servicios de prevención y tratamiento del VIH se integren sistemáticamente en las respuestas a las emergencias", dijo el Sr. Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA.

La sesión temática contempló el vasto y complejo asunto del VIH en las situaciones de emergencia, incluida la prestación de servicios de atención sanitaria y contra el VIH en situaciones de conflicto, desastres naturales, emergencias de salud pública, desplazamientos y migración. En materia de protección, se debatieron temas como la vulnerabilidad al VIH debido a la violencia sexual, las violaciones de los derechos humanos, las restricciones y las leyes y políticas punitivas. En lo referente a la resiliencia, los participantes hablaron sobre la necesidad de refuerzo y preparación de las comunidades.

Los expertos, procedentes de una amplia variedad de países como Burundi, República Centroafricana, Djibouti, Haití, Líbano, Liberia, Nepal, Nigeria, Sierra Leona y Ucrania, comentaron las realidades sobre el terreno. Hablaron de obstáculos y oportunidades y dieron ejemplos de acciones exitosas emprendidas por gobiernos y sociedad civil para combatir el VIH en una amplia variedad de situaciones de emergencia humanitaria.

En su discurso inaugural, el antiguo refugiado, el Sr. Noé Seisaba, de Burundi, quien fundó la organización Stop SIDA que lleva iniciativas esenciales contra el VIH a campos y entornos de refugiados, hizo un llamamiento a la comunidad de personas que viven con el VIH para que se implique en todos los aspectos de la planificación y la puesta en práctica. "Me enfrenté a una fuerte discriminación, pero rompí el silencio sobre el VIH para conseguir que trabajar en el VIH fuera un asunto comunitario y mostrar que podemos intervenir como refugiados, porque realmente conocemos los problemas y las realidades", afirmó. "Me alegra constatar que estamos hablando de este tema, pero quiero ver acciones concretas".

Muchos participantes reiteraron que es esencial la implicación y el empoderamiento de la comunidad de personas que viven con el VIH y están más afectadas por el virus para alcanzar resultados para las personas en estos contextos tan difíciles. "Si queremos poner fin a la epidemia de sida para 2030, debemos poner de relieve las causas principales de vulnerabilidad en situaciones de emergencia humanitaria y aumentar las acciones para fomentar el respeto por los derechos y la dignidad humana básica", declaró el Sr. George Okoth-Obbo, ayudante del Alto Comisionado de Operaciones en ACNUR.

Se animaron las estrategias entre diversas regiones para lograr un impacto y un alcance máximos. El problema de la violencia sexual en situaciones de emergencia y la desigualdad entre sexos se destacaron como aspectos fundamentales a los que se debe prestar más atención, acción e inversión.

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