El primer ministro del Consejo Estatal de China, Li Keqiang, expresó su apoyo para la respuesta al sida durante una reunión con el Director Ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, y el Director Ejecutivo del Fondo mundial para la lucha contra el sida, la tuberculosis y la malaria, Mark Dybul, el 4 de mayo en Beijing, China.

El primer ministro declaró que el gobierno chino se está centrando especialmente en la prevención del VIH, así como en reforzar los programas de tratamiento contra el VIH y mejorar la calidad de la atención a las personas que viven con el VIH. Afirmó que el gobierno está trabajando para terminar con la discriminación hacia las personas que viven con y están afectadas por el VIH.

Tanto el Señor Sidibé como el Señor Dybul agradecieron a China su aportación a la respuesta al Ébola. China ha proporcionado 120 millones de dólares y 1.000 trabajadores sanitarios a los países de África Occidental que se vieron más afectados por la epidemia de Ébola el pasado año.

El primer ministro también mencionó la importancia de que las organizaciones comunitarias trabajen en la prevención y tratamiento del VIH y se comprometió a proporcionar más fondos para apoyar su trabajo.

El Señor Sidibé agradeció el compromiso político del primer ministro para asegurar que el sida continúe siendo una prioridad en la agenda mundial y elogió el progreso de China en la respuesta al VIH. El gobierno estima que 810 000 personas vivían con el VIH en 2013 y que casi dos tercios tuvieron acceso al tratamiento contra el VIH a finales del 2014.

Anteriormente, el Señor Sidibé y el Señor Dybul se reunieron con el Ministro de Salud, Li Bin, quien aseguró que China incorporará a su planificación estratégica la visión mundial de cero nuevas infecciones por el VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el sida, así como el propósito de terminar con la epidemia de sida antes de 2030.

ONUSIDA ha pedido que se cumplan los objetivos mundiales antes de 2020 para acabar con el sida como amenaza a la salud pública antes de 2030: que el 90% de todas las personas que viven con el VIH conozcan su estado serológico; que el 90% de todos los seropositivos tengan acceso a terapia antirretrovírica; y que el 90% de todas las personas que accedan a la terapia antirretrovírica tengan supresión viral. El ministro Li declaró que los citados objetivos 90-90-90 son claros y cuantificables.